Política
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José Schulman se sumó a la postura expresada por Hebe de Bonafini y el padre Francisco Oliveira, de defender “con sus cuerpos” al ex vicepresidente, si el juez Daniel Obligado decide que debe volver a la cárcel.

“Ante la decisión de la Corte Suprema de ratificar la persecución política con forma de sentencia judicial contra Amado Boudou, la posibilidad de que el Juez Obligado modifique su prisión domiciliaria y el anuncio de la compañera Hebe de Bonafini y el Padre Paco Oliveira de frenar con sus cuerpos tal ataque a la democracia, como Presidente de la Liga Argentina por los Derechos Humanos y en su representación comunico que acompañaré a los compañeros en su decisión”, recalcó José Schulman.
De este modo, el titular de la Ladh se sumó a la postura que hicieron pública la titular de Madres de Plaza de Mayo y el integrante del Grupo de Curas en Opción por los Pobres, quienes salieron al cruce de la decisión de la Corte Suprema de Justicia que puede derivar en el regreso del ex vicepresidente a la cárcel de Ezeiza.
Al respecto, el padre Olveira pidió que Alberto Fernández indulte a Boudou y a Milagro Sala. En este sentido explicó que los presos políticos “no quieren indulto porque sería reconocer que cometieron un delito”. Pero en lo que hace al caso de Boudou, recordó palabras de Eugenio Zaffaroni quien asevera que “dentro de diez años vamos a tener que pagar 200 mil dólares a la Corte Interamericana de Derechos Humanos por el desaguisado que se hizo con Boudou, pero va a tardar diez años. Mientras tanto a lo mejor habría que dar un indulto, un indulto claramente no reconociendo ningún tipo de delito”.
Y fue claro al hacer hincapié en que es preciso evitar que “se invisibilice que seguimos teniendo cuarenta presas y presos políticos en nuestra patria”, que en algunos casos están “en prisiones de alta seguridad e irían por su quinta navidad” confinados.
Tras lo que fue lapidario al referirse a la Corte. “Si tuvieran un poquito de vergüenza, tendrían que renunciar los cinco, pero como no la tienen hay que buscar la manera de que se vayan: juicio político o como sea”.
Vale recordar que apenas se supo la decisión de la Corte de rechazar el recurso presentado por la defensa del ex vicepresidente, lo que deja firme su condena a cinco años de prisión por la Causa Ciccone, diferentes organizaciones de Derechos Humanos, sociales, políticas y sindicales se abroquelaron en defensa de Boudou.
La convocatoria se hizo extensiva al reclamo por una navidad sin presos políticos y, en este sentido, se hizo hincapié en el caso de Milagro Sala. Y también, tal como lo destacó la CTA durante el acto convocado en la oportunidad, para exigir que acabe “el lawfer contra dirigentes que siguen en distintas modalidades de prisión, ya sea efectiva o domiciliaria, que ya suman más de cuarenta”, ya que “la Justicia le debe una respuesta a la sociedad, no podemos permitir que continúe funcionando como árbitro político en favor del poder económico, como viene haciéndolo hace ya tantos años”.
Así las cosas, la defensa del ex vicepresidente pidió que el juez Daniel Obligado mantenga el beneficio de la detención domiciliaria, para lo que el magistrado debería rechazar la solicitud de los fiscales Guillermina García Padín y Marcelo Combo, quienes solicitaron que Boudou vuelva a la cárcel, a poco de que la Corte Suprema dejara firmes todas las condenas en el caso Ciccone.
En ese primer escrito, los defensores Alejandro Rúa y Graciana Peñafort, hicieron hincapié en “el interés superior del niño”, en relación a los hijos mellizos de Boudou que tienen dos años. Y señalaron que Boudou colabora “activamente en el cuidado de sus hijos, habiendo establecido una franja horaria para sus entrevistas laborales y demás actividades educativas”, mientras “su esposa continúa trabajando como asesora en la Cámara de Diputados”.
Por su parte, el coordinador de la Unidad Funcional para la Asistencia de Menores de 16 años, Marcelo Helfrich, consideró que Boudou debería permanecer bajo arresto domiciliario para que se garantice el interés superior de sus hijos menores, a pesar de que la decisión de la Corte.