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Vie, Abr
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“Vamos a garantizar un inicio de clases seguro” dijo la Directora General de Educación del municipio de Quilmes, Laura Lonardi, quien destacó la política educativa del gobierno de la provincia. Durante el receso escolar se invirtieron más de tres mil millones de pesos en insumos y obras.

“La diferencia entre la actual gestión educativa en la provincia de Buenos Aires con las anteriores, no solo con la de Vidal, es abismal”, dijo Laura "la rusa" Lonardi, Directora General de Educación del municipio de Quilmes, sobre la inversión de más de tres mil millones de pesos para establecimientos educativos que hizo el gobierno de la provincia.

De esta manera "vamos a garantizar un inicio de clases seguro, con todo lo necesario y con muchísimos avances en obras". La gestión del día a día en materia educativa en la provincia es ardua, producto de muchas décadas de abandono y desinversión. "Hay mucho trabajo por hacer, por eso con esta gestión se trabajó en cuestiones de infraestructura y acondicionamiento durante enero y febrero, cosa que con otros gobiernos no pasaba". Si bien "la rusa" reconoció que "todavía falta", enfatizó que "en Quilmes tenemos obras finalizadas en ciento ochenta y cuatro escuelas sobre un total de trescientas".

"El cambio más importante se explica por la decisión política del gobernador de inyectar todos los recursos necesarios para que la educación realmente sea un derecho para todos los bonaerenses", explicó Lonardi y agregó que "trabajamos para dar respuesta a la mayoría de las demandas de cada escuela, de cada barrio, para garantizar las condiciones mínimas de seguridad e higiene para una educación de calidad". Por ejemplo, "garantizamos todos los artículos de higiene a través de los consejos escolares y del Fondo Educativo".

Además, "durante el receso escolar se avanzó en Quilmes —como así también en muchos otros municipios— en obras de infraestructura, como por ejemplo todo lo que es techos, cubierta y exteriores". Esto es muy importante porque "durante muchos años hemos visto como se arruinaban pequeñas obras en los interiores de las escuelas porque la estructura general estaba dañada y ahí no arreglaba nadie porque esas son las obras caras". Asimismo "en muchas escuelas se hicieron obras a nuevo en baños, gas y luz y se compró mobiliario para renovar bancos, sillas y armarios".

Para el comienzo de clases de las próximas semanas la Dirección General de Cultura y Educación provincial envió fondos por tres mil millones de pesos a los Consejos Escolares de cada uno de los distritos bonaerenses. El dinero, destinado a casi catorce mil establecimientos educativos, tiene como propósito proveer elementos de higiene, limpieza y desinfección; agua envasada para consumo; reposición de vidrios, luces y matafuegos; arreglos de baños, electricidad o gas; utensilios de cocina y comedor; pintura; limpieza de tanques, corte de pasto y otras tareas de mantenimiento.