Sidebar

[Offcanvas] Navegación superior

16
Mar, Abr
82 New Articles

Política
Typography
  • Smaller Small Medium Big Bigger
  • Default Helvetica Segoe Georgia Times

Así se lo expresaron a la bancada legislativa de Red x Argentina que los recibió ayer. Temen que a caballo del encuentro, el ejecutivo perpetre una nueva vuelta de la espiral represiva que impulsa.

Ayer, el interbloque RedxArgentina recibió a trece organismos de Derechos Humanos -entre ellos la Liga Argentina por los Derechos del Hombre (Ladh)- que, entre otros temas, plantearon su preocupación por el avance represivo del Gobierno y la posibilidad de que promueva acciones de ese tipo durante la Cumbre del G-20.

Además de la Ladh, que estuvo representada por su secretario José Schulman, estuvieron presentes Estela de Carlotto por Abuelas de Plaza de Mayo y Taty Almeida por Madres Línea Fundadora.

Además se dieron cita miembros de Hijos y otros organismos que fueron recibidos por los diputados Felipe Solá, Leonardo Grosso, Victoria Donda, Lucila De Ponti, Facundo Moyano, Araceli Ferreyra y Silvia Horne.

Al respecto, Schulman explicó que los organismos “seguimos la ronda de diálogos y búsqueda de convergencias para construir alternativa popular al régimen macrista de violación de los Derechos Humanos y saqueo planificado”.

Vale recordar que, en este contexto, ya se entrevistaron con el titular de la  Comisión Episcopal, monseñor Oscar Ojea, con el movimiento sindical y amplios sectores de la Universidad y la ciencia, tras lo que la semana próxima la cita va a ser con movimientos sociales e intendentes de todo el país porque, recalcó, “el objetivo no es la unidad, la unidad es el camino y se hace camino al andar”.

La preocupación que se manifestó no es antojadiza. Desde diciembre de 2015, con la ministra Patricia Bullrich como abanderada, el Gobierno Cambiemos viene desarrollando una política represiva que crece constantemente, construye un enemigo interno a partir de quienes resisten al modelo que implementa y pone en su mira a los actores de la protesta social.

A esta estrategia de criminalización de los pobres y de todos aquellos que hagan público su disenso, la Cumbre del G-20 le viene como anillo al dedo. Oficialmente, el gobierno reconoce que de cara a la realización de la Cumbre, gastó más de 1.100 millones de pesos en armamento, equipo antidisturbios y proyectiles.

Esto se añade a las partidas regulares que el Presupuesto 2018 le suministró al Ministerio de Seguridad que, de los 918 millones asignados, destinó más de seiscientos millones a material antidisturbio.

A eso deben sumarse los 12,5 millones de euros que el Gobierno Macri gastó en cinco aviones Super-Etendard que compró a Francia con la excusa del G-20.

Pero, aunque en agosto La Rosada efectivizó el pago, estos aviones no van poder usarse durante la Cumbre que tendrá lugar del 30 de noviembre al 1º de diciembre, sencillamente porque no están aptos para volar.

Si a usted le parece que esto ya salió demasiado caro, espere, todavía hay más: la reparación de estos aviones va a costar más de cinco millones de dólares. Y otro dato: en julio de 2016 la Armada francesa retiró del servicio activo su último Super-Etendard, pero por lo visto, está encontrando compradores para el rezago.

 

Todo el poder a Bullrich

 

El protocolo de la organización de este encuentro en el que participarán 19 jefes de Estado del Grupo, más representantes de la Unión Europea y de países invitados, exige que el anfitrión tenga aviones supersónicos, misiles y radares, para la defensa en casos de “ataques terroristas”.

Queda claro que los aviones supersónicos los pondrá otro. Pero, de todos modos, el ejecutivo no se privó de gastar en maquinaria bélica, lo que recortó en áreas sensibles como Salud y Educación Pública.

Este año compró cuatro helicópteros a la estadounidense Bell -que sí funcionan-, aptos para diferentes tareas como transporte de personal, rescate y vigilancia. Además de un sistema de defensa misilístico a la empresa sueca Bofors, tres radares móviles al Invap y dispositivos tendientes a anular ciberataques.

Aquí hará su debut el paquete de software de ciberdefensa y ciberseguridad que -recientemente- el gobierno adquirió a Israel por más de cinco millones de dólares y estará a cargo del Ministerio de Defensa.

Según se supo, esta herramienta está en capacidad de interceptar ataques sobre las redes, pero asimismo atacar. Y esto no es todo: también accede a base de datos privados y públicos, al tiempo que procesar aquellos que aparezcan en redes sociales.

Por el lado del Estado argentino, el operativo va a estar a cargo del Ministerio de Seguridad en coordinación con las carteras de Defensa y Relaciones Exteriores, así como con la Agencia Federal de Inteligencia y otros organismos.

Será un comando unificado a cargo de Patricia Bullrich que “va a estar en contacto con Mauricio Macri”.

También existe coordinación con agencias de los Estados que participan, que además incluyen personal propio de seguridad en sus delegaciones.

La que acompaña a Donaldd Trump,  además de agentes de la CIA, está integrada por al menos mil guardaespaldas, un avión, un barco de comunicaciones, un portaviones y el automóvil presidencial estadounidense, un Cadillac blindado al que llaman La Bestia.

El operativo montado por Washington se extenderá a Uruguay, donde se establecieron de cara a la Cumbre alrededor de cuatrocientos estadounidenses integrantes -civil y militar- del Servicio Secreto, se suma a más ocho aviones de logística.