“Es un momento de lucha, unidad, resistencia y confrontación” pero, también, “para vincular la lucha sindical, la lucha que es esencialmente económica de los trabajadores, a la lucha política”, sostuvo Norberto Galiotti.
“Hoy más que nunca tiene la vigencia de todas las luchas de las que es protagonista el proletariado durante los años de historia de lucha de clases que venimos transitando”, dijo Norberto Champa Galiotti, de cara al Día Internacional de los Trabajadores y al paro convocado por las CTA y otros sectores, para el 30 de abril.
Esto es así, continuó el titular del Partido Comunista de Rosario, “porque estamos viviendo una nueva ola conservadora neoliberal con rasgos de fascismo, que vuelve a tener al trabajador como elemento principal del ajuste, a través de la precarización de las condiciones laborales, la sobreexplotación, la reducción de salarios por medio de la transferencia escandalosa de ingresos que se produce con los ajustes y la devaluación de la moneda y entonces se precariza la situación de los trabajadores en Argentina y toda América Latina”.
Por eso, recalcó, “es un momento de lucha, unidad, resistencia y confrontación” pero, también, “para vincular la lucha sindical, la lucha que es esencialmente económica de los trabajadores, a la lucha política”.
Ya que, recordó, “como lo planteaba Agustín Tosco: tenemos que entender que el movimiento sindical es un movimiento político, no puede estar separada la lucha de los trabajadores, la lucha sindical, de la lucha política”.
Claves
Así las cosas, Galiotti fue claro cuando remarcó que “en este Primero de Mayo, el hecho de que se comiencen a realizar actividades en unidad de las dos CTA y con la participación de la CGT es importante en cuanto a la unidad” pero también, insistió, “hay que comprender que es necesario unir la historia de lucha de distintas experiencias y corrientes políticas, para golpear como un sólo puño -como decía el Che- y producir un hecho político que frene, aún más, el avance del neoliberalismo, que le aseste un golpe muy duro a Macri, para lograr debilitarlo de tal manera que no pueda aspirar a una reelección en octubre”.
Porque, añadió, “la lucha no es sólo en las urnas: es la lucha de los trabajadores contra el ajuste, el tarifazo y el desempleo, es la lucha por llevar todas estas necesidades de los trabajadores al Congreso y que se transformen en leyes para quitar todo el espacio que fue ocupando la derecha en estos tres años y cuatro meses”.
De ahí que el titular del PC de Rosario señalara que es preciso “garantizar la participación de todos los comunistas, de todos los trabajadores en el paro del 30”, al que definió como “un paro que le dice adiós a Cambiemos y al macrismo”.
Pero advirtió que “éste es el camino que se tiene que continuar y profundizar” aunque, lamentó, “es un paro tardío, ya que debió haberse producido hace mucho, pero esto se dificultó por las condiciones que logró imponer la CGT, que busca más la conciliación y el acuerdo económico con el gobierno que defender los intereses de clase de los trabajadores”.
Por eso, hizo hincapié en que es preciso avanzar en la construcción de un sindicalismo de liberación como proponemos los comunistas.
“Hay que refundar el sindicalismo, debemos ser profundamente autocríticos porque también en las nuevas experiencias adoptamos viejas formas”, reflexionó y recalcó que el sindicalismo “debe ser clasista, de lucha y político de clase”.