La Liga Argentina por los Derechos Humanos salió al cruce de la vicepresidenta Victoria Villarruel y su reivindicación del Terrorismo de Estado. Sus actitudes son parte de "una histórica lucha por conseguir impunidad" y añadió que "los defensores de genocidas son los que hambrean al pueblo”.
"El terrorismo contra el pueblo argentino fue desde el Estado", advirtió la Liga Argentina por los Derechos Humanos (Ladh) al salir al cruce de la vicepresidenta Victoria Villarruel quien, días atrás, al encabezar un acto convocado para "conmemorar a las víctimas del terrorismo", anunció que pretende impulsar la reapertura de todas las causas judiciales que en algún momento fueron iniciadas contra personas que desarrollaron actividad militante para enfrentar al proceso dictatorial desatado durante la década del 70 del siglo pasado.
Más precisamente, aunque no especificó qué método piensa emplear para conseguir su objetivo, Villarruel sostuvo que "los montoneros tienen que estar presos respondiendo por ensangrentar nuestra Nación”, tras lo que dijo que "sólo con los asesinos en las cárceles podremos, en la unidad y el deber cumplidos, poner a la Argentina de pie".
Y significativamente, remató: "Argentina merece no ser un nido de impunidad". paradójicamente, quien dijo esto es la misma persona que fue conspicua visitante de Jorge Rafael Videla, Miguel Etchecolatz y Alfredo Astiz cuando estos de siniestros personajes ya purgaban severas condenas, porque el Poder Judicial los encontró penalmente responsables de haber perpetrado crímenes de lesa humanidad, entre otros delitos.
"Expresamos nuestra preocupación por los dichos de la señora vicepresidenta del país y reforzamos la convocatoria para que todos encontremos en los organismos, en la militancia y en la memoria el espacio desde el cual defender la democracia y profundizar la disputa por la construcción de poder", sostuvo la Ladh y fue clara al hacer hincapié en que "el fascismo no pasará ni aunque hayan vuelto al Estado".
Asimismo, al Liga recordó que "ningún genocida fue castigado sin juicio" y que en ese contexto "pudieron defenderse, tuvieron en muchos casos y durante mucho tiempo el beneplácito del Poder Judicial y otras garantías de impunidad", por lo que "los condenados y los por condenar deben estar presos".
Después recordó que "sus víctimas, nuestros compañeros, siguen desaparecidos y el pacto de silencio del Poder, de esos dinosaurios que están vivos y actuando, sigue firme" y por eso es que aún "hay más de trescientos hijos de los treinta mil detenidos desaparecidos que viven con la identidad de sus apropiadores". Y, en este sentido, advirtió que la vicepresidenta "es una irresponsable al promover estos homenajes y discursear de esa manera en el Parlamento" ya que, puntualizó la Ladh, "las acciones de grupos insurrectos jamás pueden igualarse al terrorismo de Estado".
Por eso es que sin dudarlo denunció que el homenaje que encabezó Villarruel, se encuadra en "una histórica lucha por impunidad" y añadió que "los defensores de genocidas son los mismos que hambrean a las infancias de nuestro país, los que escondieron alimentos y avanzan en la misma dirección económica y de exclusión social que promovió la dictadura y los gobiernos neoliberales que la sucedieron". Se trata de un modelo social, "en el que no entran las militancias, los laburantes, las disidencias, los jubilados ni los estudiantes", por lo cual la Liga convocó a construir "el repudio popular en las calles y en la lucha por alcanzar la Patria que soñaron los que amaban tanto que hasta la vida dieron".
