Cientos de miles de trabajadores se están congregando en la Plaza del Congreso en rechazo del DNU y la Ley Ómnibus. Los comunistas están presentes en esta importante jornada de lucha popular. “No hay razones para demorar la lucha” dijo Mario Alderete.
Al cierre de esta edición, en el marco de un paro general cientos de miles de trabajadores de todo el país poblaban los alrededores del Congreso de la Nación en rechazo al DNU y a la denominada Ley Ómnibus presentada por el gobierno de Javier Milei. Convocados por la CGT, las dos CTA y la Utep, los trabajadores vencían el “protocolo” antipopular de Patricia Bullrich y enviaban desde las calles una clara señal a todos los diputados y senadores que en las próximas horas deberán votar ambos proyectos.
Entre los presentes, se destaca una nutrida y colorida columna roja que congregó al Partido Comunista, el MTL y la Conat. Asimismo, la Liga Argentina por los Derechos Humanos desplegó su red de profesionales para contrarrestar los ademanes represivos de las fuerzas represivas de la Ciudad y Federales (Ver Los organismos movilizan).
Para Mario Alderete, miembro del Secretariado Nacional y del Comité Central del PC, “el dato más importante de hoy es la confluencia de las tres centrales y la Utep en un gran paro nacional con movilización”. Además, destacó que “junto a las centrales se movilizan en unidad los movimientos sociales, que si bien no tienen una relación permanente con las centrales obreras, en esta ocasión y dada la peligrosidad que representa el proyecto político de Milei, convergen en esta lucha común”.
De acuerdo al análisis del dirigente del PC, esta confluencia se explica por “la situación objetiva, que obliga a estos actores, de diversas características y con bases sociales diferentes, a confluir en la lucha”. Entre los motivos principales, Alderete destacó la profunda crisis económica y social que se vive en todo el país a raíz de las políticas del nuevo gobierno. “Poco más de un mes de gestión y la gente ya no aguanta más, aumenta el costo de vida todos los días, la moneda pierde valor y con ella los salarios”, manifestó.
En este contexto, dijo que “tal como sostiene el Partido Comunista no hay razones para demorar la lucha contra el nuevo gobierno” y en ese sentido valoró positivamente el proceso de unidad y lucha que condujo rápidamente a este primer paro nacional contra Milei.
Ahora, destacó, “el desafío es transformar esta difícil realidad objetiva en condiciones subjetivas propicias para acrecentar la fortaleza del movimiento social y construir un programa político de liberación nacional y social”. Hoy por hoy, y bajo estas circunstancias, “la lucha tiene que estar dirigida a rechazar de conjunto el DNU y la Ley Ómnibus, acá no hay lugar para parches ni negociaciones”, analizó. En efecto, el dirigente comunista hizo hincapié en que “ambas iniciativas forman parte de un plan más amplio destinado a saquear a los trabajadores, los bienes del Estado y los recursos naturales”.
En esta línea, puntualizó que “un claro ejemplo de ello es lo que planean hacer con el Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la Anses”. Al respecto, recordó que “la Ley Ómnibus plantea destinar los fondos jubilatorios para pagar deuda externa o como garantía para contraer nueva deuda, en un claro paso tendiente a repetir el esquema de las Afjp en el corto plazo”. Y denunció que “en poco más de un mes el gobierno de Milei ya tomó fondos del sistema jubilatorio para cumplir con las exigencias del FMI y para salvar la deuda de los grandes importadores”.
Por estos, y otros motivos, Alderete insistió en que “la situación objetiva mueve a múltiples actores de la sociedad hacia una lucha común, pero el principal desafío de la etapa consiste en reconvertir las condiciones objetivas en una poderosa fuerza político social contra el gobierno, porque aún la lucha está dispersa pese a la unidad que se manifiesta con el paro de hoy”.