El representante de La Habana ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, rechazó “la politización y la selectividad del sensible tema como instrumentos de ataque contra algunos países”.
Al intervenir en la sesión 45 del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, reunido en la ciudad suiza de Ginebra, Cuba reiteró su rechazo a la “politización y la selectividad del sensible tema como instrumentos de ataque contra algunos países”.
Ahí, el representante cubano Lester Delgado, advirtió que la tarea de la alta comisionada para los Derechos Humanos, la chilena Michelle Bachelet, debería centrarse en la imparcialidad y la universalidad.
De esta manera el diplomático repudió la actitud hostil que exhibe la alta comisionada respecto a Venezuela y Nicaragua, tras lo que hizo pública la solidaridad de La Habana con esos países.
Exhortamos a la Alta Comisionada a continuar los esfuerzos para contribuir al respeto al enfoque equilibrado, la objetividad, el diálogo y la cooperación, de los que tanto carecen este Consejo y la maquinaria de derechos humanos en general”, instó Delgado y recordó que el organismo no debe promover acciones desestabilizadoras e injerencistas, “como ocurrió en los casos de Venezuela y Nicaragua”.
Tras lo que recalcó que Cuba rechaza “las medidas coercitivas unilaterales, las continuas amenazas, la desestabilización y la injerencia, entre otras agresiones, las cuales violan de una manera grave la Carta de la ONU y el Derecho Internacional”.
En julio, la Alta Comisionada, presentó un informe sobre Venezuela que denunciaba “detenciones arbitrarias, violaciones a las garantías al debido proceso” y casos de “tortura y desapariciones forzadas”. Y el lunes pasado, al presentar su informe ante el Consejo, Bachelet denunció que el gobierno de Nicaragua respondió a la emergencia del Covid-19 “con violaciones de la libertad de expresión”.
Ante esto, Cuba insistió en su compromiso con la promoción y la protección de los derechos humanos y cuestionó que la Alta Comisionada persista en el uso de una narrativa manipulada e hipócrita. Pese a esto ratificó su apoyo a la Alta Comisionada y a un mandato sustentado en el impulso al diálogo y la cooperación.