El lunes se llevaran a cabo en diferentes países acciones que buscan la desestabilización en la Isla. El gobierno cubano las declaró ilegales, ya que están financiadas por EE.UU. Para el lunes se convoca a un abrazo a la Embajada de Cuba.
Bajo la consigna “Patria y vida, viva Cuba libre”, grupos contrarrevolucionarios planean volver a las calles este 15 de noviembre. El plan consiste en repetir y amplificar los efectos de las marchas que tuvieron lugar el 11 de julio pasado en varias ciudades cubanas con epicentro en La Habana, y también en Miami.
Como se recordará, las movilizaciones de ese día apuntaron a desestabilizar al gobierno que encabeza Miguel Díaz Canel y tuvieron un grado de violencia como no se había visto en mucho tiempo en la Isla. Esto fue amplificado por redes sociales, donde se propaló el reclamo abierto de que EE.UU. intervenga en Cuba (Ver “Contra la desinformación y la cibermentira”).
La viralización del hashtag #SOSCuba que debajo traía la incitación a sumarse a una presunta campaña de “ayuda humanitaria” al país caribeño, fue una de las razones por las que este nuevo ataque al pueblo cubano se propaló y convirtió en uno de los más agresivos del último tiempo.
De cara al lunes 15, esas protestas prevén ser acompañadas por diferentes actos convocados en casi medio centenar de ciudades de 23 países. Se trata de una reducida cantidad de Estados, si se la compara con los que se pronuncian cada año en la ONU contra el bloqueo de EE.UU. En 2021 fueron 184 votos a favor de Cuba, EE.UU. e Israel lo hicieron a favor de la prosecución de las sanciones, mientras que Colombia, Brasil y Ucrania se abstuvieron.
Apoyo
Así las cosas, este nuevo capítulo del pustch que busca acabar con el proceso revolucionario abierto en Cuba, tiene como cara visible a Yunior García, quien es un comprobado agente encubierto de Washington.
Esto quedó comprobado cuando el gobierno cubano exhibió pruebas contundentes de la participación de agencias de Inteligencia estadounidenses que aportaron logística y dinero para la organización de las movilizaciones del 11 de julio.
En este punto cabe recalcar que la política exterior de EE.UU. no varió con la llegada de Joseph Biden a la Presidencia, ya que mantuvo las 243 medidas de agresión a Cuba dispuestas por sus antecesores.
Entre ellas aparecen la limitación del envío de remesas a mil dólares por trimestre, las trabas insalvables para importar insumos médicos vitales en el combate contra la Covid-19 y la decisión de permitir demandas contra La Isla en el sistema judicial estadounidense bajo el Título III de la Ley Helms-Burton.
Sin embargo el apoyo a la Revolución siempre está presente. Norberto Champa Galioti, adelantó que desde el Movimiento Argentino de Solidaridad con Cuba (MasCuba), el lunes se va llevar a cabo un abrazo a la embajada de ese país con la consigna “Eliminar el bloqueo”, en el contexto de una jornada en la que también va a haber espectáculos y una tribuna antiimperialista.
Esta jornada va a tener su réplica en diferentes ciudades de nuestra región y el mundo, a partir de actividades coordinadas por la Red Continental Latinoamericana y Caribeña de Solidaridad con Cuba.
“Quieren generar una puesta en escena de toda la derecha continental y global”, advirtió Galioti al referirse a la convocatoria de quienes buscan desestabilizar al Gobierno de Cuba y alertó que “los gusanos no descartan hacer actos violencia”.
Pero no dudó en afirmar, que “no van a tener posibilidades, porque el pueblo cubano está organizado para no caer en provocaciones, aunque no va a dudar en hacer respetar las leyes y la Revolución”.
Y sobre García señaló que “habría que preguntarse qué pasaría si en cualquier otro país como EE.UU., hubiera agentes extranjeros organizado revuelos para derrocar a un gobierno ¿Cómo se reaccionarían ante eso?”.
Tras lo que dijo que el Frente de Todos no debe ser imparcial ante esto. “Esperamos que el gobierno mantenga su tesitura de no injerencia en los asuntos internos de ningún Estado”, señaló quien también preside el Partido Comunista de Rosario.
De ahí que “esperamos que los sectores más sensibles del Frente de Todos que tienen una acción solidaria concreta con Cuba participen de la convocatoria del MasCuba