Manuela d’Ávila salió al cruce de una declaración del Presidente de Brasil, quien vinculó el aumento de la inflación con un supuesto mayor consumo de alimentos durante la pandemia.
“Una parte significativa de la población brasileña vive en condiciones de inseguridad alimentaria y Bolsonaro habla de quién ganó kilos en la pandemia”, señaló la ex diputada Manuela d’Ávila al salir al cruce de una declaración del Presidente de Brasil, quien vinculó el aumento de la inflación con un supuesto mayor consumo de alimentos durante la pandemia.
“Todos ganaron un poco más de peso, es una realidad”, dijo Bolsonaro pese a que un reciente informe de la FAO, da cuenta de que, entre 2018 y 2020, la prevalencia de inseguridad alimentaria severa alcanzó a 7,5 millones de brasileros. Este dato se vuelve peor cuando se incluye la información relacionada con la etapa moderada, ya que más de 49 millones de brasileños se encuentran en esta situación.
En la misma dirección, un trabajo coordinado por un grupo de investigadores de la Universidad Libre de Berlín junto con la Universidad Federal de Minas Gerais y la Universidad de Brasilia, muestra que el quince por ciento de los hogares de Brasil padecen privación de alimentos y hambre, mientras que casi el sesenta por ciento -más de 125 millones de personas-, sufrió inseguridad alimentaria en el último trimestre de 2020.
Al respecto, la dirigente del Partido Comunista do Brasil (PCdoB), recordó que a raíz de la política económica que implementa el gobierno que encabeza Bolsonaro, “la inflación más alta en agosto de los últimos 21 años se siente en los bolsillos y en la mesa de trabajadores”. Y, sin dudarlo, advirtió que se trata de “políticas genocidas y neoliberales que son un retraso para Brasil”.
De acuerdo al Instituto Brasileiro de Geografía e Estadística, agosto de este año registró la tasa más elevada para ese mes de lo que va del siglo 21. Transporte y alimentos fueron los principales responsables del aumento.