El Partido Comunista Portugués alerta sobre las condiciones que la Unión Europea provoca al aceptar las imposiciones de la Otan y EE.UU.
“La evolución de la situación en Ucrania, con los sucesivos empeoramientos, puede traer consecuencias terribles para todo el planeta”, advirtió el secretario General del Partido Comunista Portugués (PCP), Jerónimo de Sousa, y recalcó que “la escalada de la guerra en Ucrania y la espiral de sanciones impuestas por EE.UU., la UE y la Otan con la complicidad del Gobierno portugués, son inseparables de los precios desenfrenados y al alza de la energía, los alimentos y otros bienes de primera necesidad, del ataque a las condiciones de vida de los pueblos, arrastrando al mundo a una situación económica y social aún más grave”.
Los dichos del titular del PCP nada tienen de antojadizos. Esta semana y el Banco Central Europeo debió subir la tasa de interés en 75 puntos básicos, lo que significa la medida más contractiva en su política monetaria desde que fue fundado en 1999. De esta manera busca mitigar los efectos de la inflación que se disparó al 9,1 por ciento en agosto.
Con este telón de fondo, De Sousa denunció que “la realidad revela a quienes hacen de todo para evitar que la guerra termine, que hacen de todo para amasar colosales ganancias con su continuación, como el complejo militar-industrial y las grandes transnacionales de energía y alimentos”.
Por lo que sin dudarlo aseveró que “está claro a quién sirve la guerra, quién gana con su continuación y quién se beneficia del sufrimiento de los pueblos” que son “los que apuestan por las armas y más armas, por la guerra y más guerra, lo hacen porque lo ven como una fuente de lucro y especulación”.
Asimismo fustigó al gobierno que encabeza el socialdemócrata António Costa que “como consecuencia de sus opciones a favor de los grandes intereses económicos y financieros y del sometimiento a la Unión Europea” se vuelve “cada vez más derechista”.
Por lo que alertó que “la situación que vivimos es preocupante, pero no menos lo son las opciones de un gobierno y una política que hacen la vista gorda, dando paso a la especulación, la explotación y el desvergonzado desvío de las condiciones de vida del pueblo por parte del gran poder económico”.
Y destacó que “la espiral inflacionaria que se viene dando desde hace más de un año es preocupante y avanza sin control, devorando el poder adquisitivo de salarios y pensiones y poniendo en riesgo sectores enteros de la economía nacional, con miles de micro, pequeñas y medianas - empresarios, agricultores y pescadores de gran envergadura, muy afectados por los crecientes costes que tienen que soportar”.