El Partido Comunista advirtió que el intento de ingreso de Suecia y Finlandia a la Otan, “convertiría el Ártico en una zona de confrontación militar con un gran costo para la seguridad ambiental del planeta Tierra”.
El Partido Comunista de Gran Bretaña (PCB), hizo pública su oposición al ingreso de Suecia y Finlandia a la Alianza del Atlántico Norte (Otan) y advirtió que se trata de una iniciativa “peligrosa que convertiría el Ártico en una zona de confrontación militar con un gran costo para la seguridad ambiental del planeta Tierra”.
Cabe recordar que el auspicio de Gran Bretaña y EE.UU. a la obtención de la membresía de Finlandia para la Otan, se profundizó desde que estalló el conflicto entre Ucrania y Rusia. Y a esto, Washington y Londres le sumaron el dirigido a Suecia.
De las formaciones estatales que poseen soberanía sobre el círculo polar ártico, con excepción de Rusia, actualmente sólo Finlandia y Suecia no integran la Alianza Atlántica. En el caso de Groenlandia, si bien tiene gobierno autónomo, sus relaciones internacionales y Defensa corresponden a Dinamarca que forma parte de la Otan.
Por eso la preocupación del PCB nada tiene de antojadiza, como tampoco la tiene aquella que hace pública cuando señala su “decepción por el silencio de los parlamentarios laboristas frente a la militarización de Europa del Este por parte de la Otan y la acumulación de fuerza militar por parte de Occidente contra China”.
En este contexto el PCB también alertó acerca del “enorme avance de la censura durante la Guerra de Ucrania, que subraya la necesidad de que la izquierda reclame la causa de la libertad de expresión frente a la derecha”, por lo que instó a “desafiar el control monopólico de los medios masivos y sociales”.