Policías retirados y en actividad convocan a movilizar en apoyo de Jair Bolsonaro. El PCdoB y otras fuerzas políticas advierten sobre la escalada que encabeza el propio presidente.
Junto a otras fuerzas políticas, el Partido Comunista de Brasil (PCdoB), suscribió una declaración en la que se solidariza con el Tribunal Supremo Federal (STF) y el Tribunal Superior Electoral (TSE), sobre los que durante las últimas semanas arreciaron los ataques por parte del gobierno que encabeza Jair Bolsonaro.
La cosa pasó de castaño oscuro cuando, el lunes pasado, policías retirados y en actividad cuando destruyendo la cadena de mando, convocaron a participar de movilizaciones para pedir la intervención militar, como respuesta a la investigación a Bolsonaro que lleva a cabo este Tribunal. Se trata de marchas previstas en Brasilia y San Pablo para el 7 de septiembre, fecha en que se celebra el Día de la Independencia de Brasil.
Entre los convocantes aparece el coronel Aleksander Lacerda, quien hasta la semana pasada comandaba siete batallones de la policía militarizada de San Pablo, cargo del que fue destituido por el gobernador, Joao Doria, a raíz de este hecho.
Ante esto, Lacerda acusó al gobernador de “ser blando contra la izquierda” y recalcó que “para derrocar la hegemonía izquierdista en el país es necesario un tanque y no un carrito de helados”, por lo que tras amenazar con que “el clima va a calentarse”, hizo hincapié en que “la libertad se toma”.
Quien firmó la declaración por el PCdoB, es la vicegobernadora de Pernambuco y presidenta de este partido, Luciana Santos. “Es repugnante ver a Brasil en medio de una de sus mayores crisis y al presidente eludiendo sus responsabilidades con la salud pública, la economía y el bienestar de la población, para seguir enfocado en crear hechos falsos para alimentar su base que, por cierto, se hace más pequeña”, recalcó.
