Tras el triunfo de la derecha, la disolución del Parlamento y la convocatoria a elecciones anticipadas por parte de Emmanuel Macron, la izquierda apela a la unidad en Francia.
El Partido Comunista Francés (PCF) instó ayer a la construcción de un frente popular “por el futuro de la República y de Francia”. Lo hizo después de que el presidente Emmanuel Macron decidiera disolver el Parlamento, lo que lo obligó a convocar a elecciones nacionales anticipadas para finales del presente mes, después de que su partido quedara segundo en el capítulo francés de los comicios al Parlamento Europeo celebrados el domingo en los que los dos principales partidos de ultraderecha se quedaron con alrededor de cuarenta por ciento de los votos.
Macron tomó el guante que arrojó el líder de Agrupación Nacional, Jordan Bardella, a poco de conocerse los resultados. “El presidente de la República no puede hacer oídos sordos al mensaje enviado por los franceses esta noche”, dijo públicamente y pocas horas después Macron dio un paso que no daba un presidente francés desde 1997 cuando Jacques Chirac perdió la mayoría y disolvió la Asamblea Nacional.
“Queremos prestar ante ustedes este juramento de estar unidos hasta la victoria”, recalcó el secretario nacional del PCF, Fabien Roussel, el domingo por la noche al dirigirse a los militantes que se agolparon ante la sede partidaria en París. Al día siguiente, junto a otros partidos de izquierda, el PCF, se dio cita para participar en un encuentro en el que la premisa fue “encontrar una unión de cara a las elecciones legislativas anticipadas del 30 de junio”, ya que “es preciso estar unidos hasta la victoria”.
En este sentido, el propio Roussel hizo hincapié en que el 30 de junio “sólo habrá un candidato de izquierda en la boleta de un frente popular” que, aclaró, “vamos a construir con los sindicatos y otros sectores” con los que “asumimos el compromiso y hemos hecho un juramento” que va en tal sentido. Además del PCF, suscribieron ese acuerdo La France Insoumise (LFI), el Partido Socialista, la Place Publique, diferentes actores de los movimientos sindical y social, así como ecologistas.
“Basándonos en nuestra historia, ponemos toda nuestra energía en construir un frente popular amplio, capaz de llevar esperanza a la izquierda y derrotar a la extrema derecha”, resaltó Roussel y aclaró que el acuerdo se basa en “un pacto por Francia con las medidas esenciales capaces de responder a las emergencias sociales, ecológicas y de paz”, algo que debe plasmar en la presencia de “candidatos únicos en la izquierda en cada circunscripción para una alternativa a Emmanuel Macron y la Agrupación Nacional”.
Con este telón de fondo, el secretario nacional del PCF sostuvo que el Frente popular que va a salir al ruedo de cara a las elecciones anticipadas, se diferencia del Nupes que fue la coalición que efímeramente reunió a fuerzas del abanico de la izquierda durante 2022. “Presentaremos un programa de ruptura para los cien primeros días de Gobierno del nuevo Frente Popular”, señala al respecto una declaración pública que se difundió al término de una reunión en la que participaron el PCF, LFI, los socialistas y los verdes.
Mientras tanto, desde el domingo por la noche cuando se conoció el resultado electoral, en diferentes ciudades de Francia tuvieron lugar varias manifestaciones que fueron protagonizadas sobre todo por jóvenes que se pronunciaron contra la derecha. En París, la movilización comenzó en la Plaza de la République y desde ahí se extendió por las calles de la ciudad.