El precariado y la deslocalización golpean duro a los trabajadores de la industria metalúrgica de Cádiz. El Partido Comunista demanda que renuncie el ministro del Interior.
El Partido Comunista de los Trabajadores de España (PCT), reclamó la dimisión del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, a quien responsabiliza por la situación que llevó a la huelga que durante los últimos diez días protagonizaron los metalúrgicos en la provincia de Cádiz.
Cabe citar que, en este contexto, los trabajadores llevaron a cabo diferentes movilizaciones que fueron reprimidas por personal policial que, entre otras cosas, utilizó una tanqueta de las Fuerzas Armadas que fue reacondicionada para ser empleada por las fuerzas antidisturbios de la Guardia Civil.
“La huelga de los metalúrgicos en la provincia de Cádiz está siendo reprimida salvajemente por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado a instancias del ministro del Interior”, denunció el PCT y advirtió que durante más e una semana, “el Estado no ha ahorrado recursos al intentar boicotear el derecho de huelga y la lucha legítima de los trabajadores”.
Y tras insistir en la responsabilidad que le cabe al ministro Grande-Marlaska en “los nefastos hechos que presenciamos desde el inicio de la huelga”, instó al conjunto de la clase obrera española “para que se solidarice con la huelga de los metalúrgicos en Cádiz y con todas las luchas obreras que estallan en todo el país”.
En la provincia de Cádiz, el sector metalúrgico suma alrededor de veinte mil obreros, que decidieron ir a un paro indefinido porque ven peligrar la renovación del convenio colectivo que caducó en diciembre de 2020, pero también para exigir mejoras salariales y estabilidad laboral, en un contexto en el que la adscripción de España a la legislación de la Unión Europea, favorece el precariado y la deslocalización.