Lo protagonizan “dueños de camiones estrechamente vinculados a clanes financieros de nuestro país”, según denuncia el PCCh.
El lockout de los transportistas de mercadería, lleva diez días de lokout con bloqueos de rutas, sobre todo en el sur de Chile, para presionar a que el gobierno reprima con más dureza a los integrantes de comunidades mapuche que reclaman la restitución de sus tierras.
Se trata de 53 bloqueos en el que participan alrededor de dos mil camiones, lo que ya provoca desabastecimiento de productos básicos en Santiago y otras ciudades en las que también se hacen sentir fuerte restricciones propias de la situación provocada por la pandemia.
Ante esto, el Partido Comunista de Chile (PCCh), hizo pública su “profunda preocupación y rechazo a la actitud complaciente y antidemocrática del gobierno de Sebastián Piñera, ante el paro ilegal que llevan adelante grupos de dueños de camiones, estrechamente vinculados a clanes financieros de nuestro país”.
En este sentido, recordó que el mandatario legitimó “el chantaje de esta acción que atenta en contra del estado de derecho, y se ha puesto de su lado, para presionar al Parlamento en el intento de aprobar leyes represivas dirigidas, especialmente, en contra del Pueblo Mapuche”.
Tras lo que hace hincapié en que el lokout “amenaza con desabastecer el sur del país y agrava la compleja situación sanitaria que se vive en el país”.
Y, sin dudarlo, asevera que resulta “muy evidente que el gobierno avala esta movilización sediciosa, se niega a reprimirlos, y se aprovecha del conflicto para que el Congreso apruebe una serie de leyes represivas”.
De ahí que el PCCh denuncie “esta antidemocrática acción”, al tiempo que insta a que, “desde el Parlamento debamos oponernos a la agenda represiva que se pretende instalar”.
Por otra parte, denuncia “la acción de la institución de Carabineros, que ha resguardado el bloqueo de carreteras y ha protegido a quienes, incluso, dañan el tránsito de ambulancias y transporte de trabajadores de la salud, así como transporte que moviliza alimentos y otros bienes de consumo de primera necesidad”.
Y advierte que el gobierno, “una vez más, viola su propio estado de derecho, y persiste en el camino del autoritarismo” mientras incrementa acciones represivas “contra de quienes, en todo Chile, se movilizan por sus derechos, por demandas sociales de urgencia y porque el plebiscito del 25 de octubre sea una jornada cívica, ciudadana y democrática que permita al Pueblo pronunciarse a través del voto”.