La medida de fuerza se sintió en todo el país y muestra a las claras el ascenso de las luchas sindicales y sociales impulsadas por los trabajadores en el marco de la crisis económica.
La Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera) realizó el 10 de agosto un contundente paro nacional contra la criminalización de la protesta social, a raíz de la condena contra Santiago Goodman, y exigiendo la reapertura de paritarias en todas las provincias, muchas de ellas en pie de lucha, para contrarrestar los efectos de la inflación.
Al respecto Leandro Pozzi, del Partido Comunista de Entre Ríos y miembro de la comisión directiva de Agmer, el sindicato docente de esa provincia, dijo que “el paro fue una respuesta contundente promovida por la Junta Ejecutiva de Ctera frente a un hecho de criminalización de la protesta como fue el fallo, absolutamente desproporcionado e injusto, contra Santiago Goodman”.
En la jornada de lucha, “también exigimos aumentos de emergencia para los jubilados docentes nacionales y la urgente resolución de los conflictos desatados en distintas provincias, la mayoría de ellos relacionados a la no reapertura de paritarias”.
Asimismo, el paro también tuvo como objetivo forzar un incremento del salario que le permita a los trabajadores docentes recomponer sus ingresos. Pozzi puntualizó que "si bien la paritaria nacional docente estableció un piso salarial, sujeto a monitoreo, son las provincias quienes tienen que definir la recomposición salarial según los escalafones, que varían de una provincia a otra". Por ejemplo, "en Entre Ríos estamos a la espera de que el gobierno provincial convoque la paritaria, mientras que Santa Fe, Mendoza o Tucumán están en pie de lucha ante la falta de diálogo".
En opinión del dirigente de Agmer, “estas luchas marcan la gravedad de la crisis inflacionaria que atraviesa el país, que afecta especialmente a los trabajadores y que en parte es producto del accionar de los formadores de precios”.
Para los trabajadores docentes de todo el país este paro docente fue también el paso más concreto y más claro de cara a la movilización sindical del 17 de agosto. Con relación a la manifestación, manifestó que “vamos a movilizar masivamente para torcer el rumbo económico a favor de los trabajadores”. Además, dijo que “es sumamente preocupante que el nuevo ministro de Economía no haya anunciado ni delimitado ningún tipo de medida favorable a los trabajadores en general y a los docentes en particular”.