Con el resultado de la elección de la semana pasada, el Movimiento Universitario de Izquierda va a pasar a tener el primero y segundo de los representantes en el Consejo de Escuela de Humanidades.
Del 24 al 28 de septiembre se llevaron a cabo las elecciones de Consejo de la Universidad de San Martín (UNSaM), para renovar las distintas áreas de cogobierno de la institución y el Movimiento Universitario de Izquierda (MUI), integrando el Frente Estudiantes por la Patria, logró imponerse en la Escuela de Humanidades y así suma una banca más del claustro estudiantil.
El resultado de estos comicios ratifica la línea de trabajo militante que viene desarrollando el MUI ya que, como se recordará, recientemente fue nuevamente elegido por amplia mayoría como conducción del Centro de Estudiantes de la Escuela de Humanidades (Cehum), esa vez como parte del Frente Humanidades de Pie en el que también están el MUI y La Mella. En esta oportunidad, la Lista 2-Humanidades de Pie se hizo con 279 votos, mientras que la del Frente de Estudiantes de Izquierda quedó segunda con 73 votos y la 9-Construir UNSaM se ubicó en tercer lugar con apenas trece.
Así las cosas, conforme el resultado de la semana pasada, Giselle Meli y Leonel Galateo Mariani serán los dos nuevos consejeros estudiantiles en la Escuela de Humanidades. Pero esto no es todo, ya que por primera vez, el MUI pudo presentar candidaturas a Consejo Superior y a Consejo de Escuela en el Instituto de Altos Estudios Sociales (Idaes).
En las elecciones del Consejo Superior quedó primera Construir UNSaM con el 36 por ciento de los votos. Esa fuerza viene siendo conducción de otros centros de estudiantes de la universidad, mientras que el Nuevo Espacio Académico/Franja Morada fue la segunda fuerza con el veintitrés y detrás quedó Estudiantes por la Patria.
Con este telón de fondo Galateo Mariani, sostuvo que “vamos a seguir construyendo y apostando a espacios de representatividad cada vez mayores”, pero también “vamos a fomentar que los compañeros continúen activando y desarrollando política”. Y, en este sentido, atribuyó la contundente victoria registrada en Humanidades, “al trabajo militante para la transformación de la universidad que se ha visto durante estos años con la consolidación en Humanidades y ahora teniendo candidatos en otras escuelas”.
Por otra parte, el flamante consejero fue claro cuando encendió luces de alarma por los constantes ataques que el sistema público, universal y gratuito de educación recibe desde los candidatos del bloque de representación que va de la derecha hacia la ultraderecha. “La educación pública se encuentra bajo asedio por dos propuestas privatizadoras de la universidad y del sistema en general”, indicó y añadió que se trata de un momento difícil, ya que “derechos básicos y cosas conquistadas a través de la lucha de múltiples generaciones están siendo puestos en duda” por lo que remarcó que es preciso que “nos pensemos como herramientas organizadoras de la resistencia que se viene”.
De ahí que, sin dudarlo, hizo hincapié en que “hay que construir obligatoriamente un frente de masas dentro de las universidades, secundarios y terciarios, para poder crear un buen dispositivo de representación estudiantil y lucha” y tras sostener que “es importante analizar el discurso y el crecimiento de las derechas a nivel nacional y replantear como se construye políticamente”, lamentó que “como gran exponente de la representación universitaria, Franja Morada propone que los centros estudiantes sean espacios de desmovilización política y apenas se restrinjan a gestionar recursos”.
Por eso es que destacó como un hecho auspicioso que “consigamos meter actividades con bastante representación y bastante participación política en una escuela y una universidad donde la participación política es casi nula” y finalizó resaltando que “ese es el nuevo papel que debemos tomar, teniendo siempre en acto las banderas de la educación pública y de calidad”, como así “tratar de conseguir nuevos espacios y defender los derechos humanos y las condiciones de vida de la gente ante los intentos atroces de la derecha fascista”.
