Esta es la clave de la propuesta del Partido Comunista Peruano para enfrentar la escalada de derecha que amenaza con llevarse puesto al gobierno que encabeza Pedro Castillo.
El titular de la Federación de Trabajadores de la Construcción Civil de Perú, Luis Villanueva Carbajal, fue designado secretario general del Partido Comunista Peruano (PCP) durante el Congreso Nacional que esa fuerza celebró días atrás.
Bajo la consigna “Por un Perú democrático, popular y antineoliberal”, delegados de todo ese país deliberaron y coincidieron a la hora de expresar que es preciso avanzar hacia “una nueva Constitución para construir un Perú con justicia y dignidad”.
En este contexto, el titular del Comité Central de Ica, Fidel Andía, señaló que el PCP pretende tener un papel protagónico “en el proceso de cambios estructurales que Perú requiere para lograr su desarrollo independiente y el bienestar de nuestro pueblo”.
Tras lo que advirtió sobre el complejo escenario que se presenta de cara a la salida de la pandemia. “El mundo capitalista vive una profunda crisis económica estructural, que se ha recrudecido como consecuencia de la pandemia de Covid-19 que ha desnudado descarnadamente las falencias y contradicciones del sistema económico y social neoliberal vigente”.
Y añadió que la pandemia demostró, “de modo contundente, el fracaso de las prácticas y políticas neoliberales”, al tiempo que “ha ahondado seriamente la desigualdad social, afecta los recursos de largo plazo y la igualdad de oportunidades en numerosas dimensiones”.
En este sentido, alertó sobre el incremento del desempleo y la pobreza, mientras que “determinados sectores empresariales, sin mayor rubor, se vienen enriqueciendo a costa de las carencias y necesidades de nuestro pueblo”, pero destacó que “esta situación no va a revertirse fácilmente, más allá de que el nuevo gobierno que encabeza Pedro Castillo, pretende lograr el cambio del modelo neoliberal que todos esperamos”.
Y fue claro al alertar que para enfrentar “la brutal agresión de la ultraderecha fascista en nuestro país y garantizar los cambios que el actual gobierno se propone alcanzar”, se requiere “forjar una mayor capacidad organizativa y fortalecer la capacidad de movilización”.
A la derecha de la derecha
La advertencia que hizo Andía no es caprichosa. La semana pasada, integrantes de la Fundación Disenso que preside el líder de Vox, Santiago Abascal, viajó a Perú donde se entrevistó con la titular de Fuerza Popular, Keiko Fujimori y otros dirigentes de ese espacio. Antes habían estado en Colombia, donde mantuvieron un encuentro con el ex presidente Álvaro Uribe.
Durante este periplo, esta Fundación presentó y sumó adhesiones para el próximo Congreso que va a celebrar el Foro Madrid, que es un espacio en el que participan fuerzas políticas y sociales de derecha, “para hacer frente al crecimiento del comunismo en Iberoamérica”.
Se trata de espacios y referentes políticos que suscriben a la Carta de Madrid que en su declaración de principios señala que “el avance del comunismo supone una seria amenaza para la prosperidad y el desarrollo de nuestras naciones, así como para las libertades y los derechos de nuestros compatriotas”, así como que “la defensa de nuestras libertades es una tarea que compete no solo al ámbito político, sino también a las instituciones, la sociedad civil, los medios de comunicación”.
Entre los firmantes de esta Carta, aparecen el hijo del presidente de Brasil, Eduardo Bolsonaro, pero también algunas joyitas que actúan en la vida política de Argentina, como los diputados por Juntos por el Cambio Carla Piccolomini, Norberto Schiavoni, Pablo Torello, Waldo Wolff, Alberto Assef y David Schlereth.