Fue en Villa Constitución, cuna obrera y de lucha, donde se rindió tributo a este dirigente del partido Comunista, recientemente fallecido.
Un numeroso grupo de amigos, compañeros y familiares se desplazaron el viernes hasta la Reserva Natural Isla del Sol, una reserva ecológica en la costa del río que constituía el sueño de Tato y la cooperativa en que trabajaba. Allí se depositaron sus cenizas, cobijadas ahora por unos árboles.
En la Biblioteca Popular María Perrisolse desarrolló el homenaje a quien fuera personalidad destacada en las innumerables luchas de la Villa por casi cincuenta añosde militancia comunista.
Integrante de movimientos sociales, cofundador del Movimiento de Unidad Villense y de la CTA, Tato es parte ineludible de la historia reciente de Villa Constitución y deja un legado construido en el consenso, el respeto y la convicción de sus ideales.
Tito Martin, Carlos Sosa y Alberto “Tato” González, todos ellos dirigentes sindicales de gran prestigio, constituyen la continuidad del Partido Comunista en esa combativa región.
Las palabras de bienvenida de PiruPeretti, dirigente del PC Villense y la poesía de Roque Dalton, a quien Tato amaba, rompió la espera de una concurrencia numerosa. Estaban los ferroviarios, los metalúrgicos, las fuerzas políticas locales, sus compañeros y compañeras de Rosario, de Santa Fe, de San Nicolás y una nutrida delegación del Comité Central del PC encabezada por su Secretario General Víctor Kot.
Después de la música a cargo de Sebastián Graf y otros intérpretes, hablaron José Luis Livolti, secretario del PC provincial, quien destacó su amplitud, profunda firmeza, madurez política y gran paciencia. También se expresó AyelenSimiani, de la Corriente Nacional de la Militancia y el Movimiento de Unidad Villense, resaltando el cariño y ascendencia de Tato. JoséSchulman,quien recorrió en su discurso largos años de experiencias políticas, prisiones y represión. Al cierre Alcira González, la hija, habló en nombre de toda la familia con pura garra combativa.