Tuvo lugar el Congreso de Educación Ambiental y Economía Social y Solidaria organizado por Suteba y la Universidad Nacional de Quilmes.
Se realizó el Congreso de Educación Ambiental y Economía Social y Solidaria que fue organizado por Suteba y la Universidad Nacional de Quilmes y busca impulsar una formación integral en economía social, solidaria y educación ambiental, que promuevan un análisis reflexivo y comprometido sobre las prácticas que procuren un buen vivir para todos.
Los principales ejes del encuentro fueron las problemáticas socio-ambientales, sustentabilidad y economía social y solidaria, así como Economía social y solidaria y géneros, economía feminista, formación, educación y capacitación en economía social y solidaria.
Al respecto Cesar Zubelet, integrante de La Violeta y del Frente Stella Maldonado, conducción del Suteba de La Plata, dijo que “la problemática ambiental, es parte de nuestra agenda de trabajo, ya que no podemos pensar la educación, asilada del ambiente y de la forma y del modo de producción de nuestro país”.
Tras lo que recordó que desde La Violeta se construye el Observatorio Ambiental de Trabajo Docente Nuestra América, “como una herramienta para trabajar la temática ambiental en la comunidad educativa”, ya que para la provincia de Buenos Aires y todo el país, “los problemas ambientales son variados y de diferentes orígenes y la escuela publica no puede estar ausente de este debate”.
El referente gremial también explicó que este observatorio “es una herramienta de trabajo político, desde donde se investiga y analiza las problemáticas, para promover la participación ciudadana, fundamentalmente de las y los docentes que buscan concientizar a sus alumnos en las problemáticas ambientales”.
Igualmente, hizo hincapié en que los problemas del medio ambiente, “tienen su origen en el sistema económico y depredador como es el capitalismo, ya que el agotamiento de los recursos naturales, los no renovables de energía, la flora y fauna, junto al debilitamiento de la calidad de vida del planeta, demuestran lo insustentable que es el modo de desarrollo de la sociedad actual, de ahí surge la necesidad de pensar las respuestas a las problemáticas ambientales, desde otro paradigma político económico y social, a que a nuestro entender no puede ser dentro de la lógica capitalista de producción”.
Finalmente, recalcó que “las fumigaciones con glifosato en zonas rurales, el alto nivel de arsénico en el agua en lugares como Junín y Saladillo, la erosión de la costa bonaerense, la elevación de los niveles de la napa freática en el gran Buenos Aires, la contaminación del Riachuelo, las empresas que tiran sus desechos a los arroyos, y los basurales a cielo abierto, son algunas de la problemáticas ambientales que hoy tiene la provincia de Buenos Aires, y sobre las cuales debemos construir las respuestas junto a las comunidades educativas”.