En el marco de la escalada de precios y en un contexto de presiones devaluatorias constantes por parte de los sectores agroexportadores, Raùl Toto Galván valoró positivamente el paquete de medidas que está proponiendo la CTA para “enfrentar la feroz ofensiva del poder fáctico”. Criticó al gobierno y a la CGT por la situación actual de los trabajadores.
“Aunque llega tarde, las propuestas realizadas por la CTA son importantes” valoró Raùl Toto Galván, dirigente del Movimiento Campesino de Liberación e integrante del Comité Central del Partido Comunista, luego de que la central que conduce Hugo Yasky hiciera circular por todo el país un programa de medidas con el propósito de enfrentar la feroz ofensiva del poder fáctico, que se manifiesta en la actualidad en un incremento constante de los precios, especialmente de los alimentos.
Si bien valoró las medidas propuestas por la Central, el dirigente del PC no dudó en señalar que “durante los últimos tres años la CTA estuvo inmovilizada y en silencio”, y destacó que “ahora es tan evidente la gravedad de la situación que estamos viviendo que se decidió tomar la iniciativa política”. En ese sentido, dijo que “nunca es tarde para confrontar contra los formadores de precios, pero tuvimos un gobierno favorable durante cuatro años y en vez de avanzar hemos retrocedido”.
Para Galván, “las medidas que propone la CTA son fuertes e importantes”. Entre ellas, destacó el pedido de reapertura de las paritarias para el sector público y privado, la solicitud de un aumento salarial de emergencia a través de suma fija y un aumento de emergencia para jubilados y pensionados, como así también la solicitud de aplicar las leyes de “Defensa de la Competencia”, de “Abastecimiento” y de “Defensa del Consumidor” para frenar la especulación con los alimentos, entre otras.
Mientras la CTA se pronuncia con un paquete de medidas concretas, “el gobierno se muestra sumamente impotente para contener la escalada”, expresó. “El gobierno nunca pudo resolver el tema de los precios” amplió, y se mostró desconfiado ante la posibilidad de que el intento del ministro de Economía, Sergio Massa, de avanzar en un nuevo acuerdo de precios que brinde estabilidad por, al menos, noventa días.
De acuerdo al análisis de Galván, no es un dato menor que “desde que el Frente de Todos asumió, se mostró impotente al momento de confeccionar una política efectiva que le ponga un freno al incremento en los precios de los alimentos” y deslizó que “por momentos la falta de pericia se parece mucho a la falta de voluntad para cambiar la situación”. En efecto, aseveró, “el gobierno no quiere confrontar con los formadores de precios”.
Frente a esta coyuntura, el dirigente comunista dijo que “no extraña la pasividad actual de la CGT, dado que históricamente ha jugado para los sectores de poder y concentrados de la economía”. Por acción u omisión, “la pasividad de la CGT le hace el juego a los agroexportadores y a los formadores de precios”, analizó.
Galván es un dirigente campesino, de la localidad de Sáenz Peña, Chaco, con amplia trayectoria en el movimiento campesino. Su experiencia le indica que “uno de los enemigos más importantes que tiene el pueblo en la actualidad son los agroexportadores, quienes siempre han especulado y ahora encima incrementaron su poder a raíz de la debilidad del gobierno”.
Hizo hincapié, entonces, que “a los pequeños y medianos productores, como a los sectores que nos organizamos en torno a la agricultura familiar, nos hace mucho daño las incapacidades programáticas del gobierno y el poderío de los agroexportadores, que pujan por una devaluación y provocan cotidianamente el encarecimiento del precio de los alimentos”. Y, dado el panorama, concluyó que “la situación es imparable y no se va a detener si el pueblo no se organiza para poner un freno a los aumentos”.