Diferentes organizaciones sociales, sindicales y de Derechos Humanos acompañaron el reclamo que en tal sentido se hizo ante la embajada británica.
La presidenta de la Liga Argentina por los Derechos Humanos, Iris Pereyra de Avellaneda, participó de la delegación que se dirigió hacia la sede de la embajada del Reino Unido ante nuestro país, con la intención de entregar una nota en la que se solicita la libertad de Julian Assange y que Londres no lo extradite a EE.UU. donde podría ser condenado a 175 años de prisión.
“Intentan silenciar cualquier voz que se oponga”, denunció en el lugar Adolfo Pérez Esquivel, que fue quien articuló esta iniciativa que estuvo coordinada por los colectivos Set Julian Free, Free Assange Wave y Libertad Assange Argentina que formó parte de otras similares que se realizaron en diferentes ciudades del mundo durante la misma jornada.
La cita fue el lunes pasado y, por tal motivo, se dieron cita representantes de organizaciones sociales, sindicales y de Derechos Humanos que al llegar a la sede diplomática ubicada en el barrio porteño de Recoleta, se encontraron con un fuerte dispositivo policial pero nadie salió a recibir la misiva que, entre otros, suscriben el periodista y premio Pullitzer Chris Hedges, el ex miembro de la Corte Suprema Eugenio Zaffaroni y el politólogo Atilio Boron.
Vale recordar que Assange es fundador de WikiLeaks y está preso en Inglaterra por revelar información confidencial que expuso crímenes de guerra y contra la humanidad que fueron perpetrados por EE.UU. “Lo conozco personalmente, estuve con él dos horas en la embajada de Ecuador en Londres, lamentablemente el entonces presidente de Ecuador, Lenin Moreno lo hizo detener y lo mandó a prisión”, recordó Pérez Esquivel al dirigirse a los presentes, tras lo que hizo hincapié en que “sabemos lo que significa la prisión de Julian, porque nos afecta a cada uno la libertad de prensa, el derecho a informar y ser informados, y la política de EE.UU. de silenciar cualquier voz que se oponga a las atrocidades que comete en el mundo”.
Por lo que, sin dudarlo, Pérez Esquivel demandó “que la justicia Británica que no lo extraditen porque eso representa una condena a muerte y defendemos la vida de cada uno de los periodistas que dedican su vida a la información”.