Así se prepara la octava Marcha por la Soberanía a Lago Escondido va a llevarse a cabo durante febrero próximo, tal como lo describe Laura Leonardi, quien nuevamente va a ser de la partida en esta edición.
Convocada por la Fundación Interactiva para Promover la Cultura del Agua (Fipca) junto a organizaciones sindicales, políticas y sociales entre las que está el Partido Comunista, la octava Marcha por la Soberanía a Lago Escondido va a llevarse a cabo durante febrero próximo y quienes serán de la partida, se preparan y anticipan que la edición de este año promete ser mucho más contundente que las anteriores.
Por el PC ya confirmaron su presencia Pablo Moren, Bárbara Palumbo, Christian Poli, Solana López, Rebeca Barberán, Bruno Lonati, Andrea Mossano, Emanuel Ríos, Rosalino Ramírez, Roberto Scalzo y Rocco Carbone, así como la consejera escolar y secretaria de Géneros de la CTA de Quilmes, Laura Leonardi, quien ya participó en ediciones anteriores y que advierte sobre cuál es el esquema que integra quien usurpa Lago Escondido, el magnate británico Joe Lewis.
“Forma parte del diseño que la Otan dispone para América Latina”, señala y recalca que “no es casual que la estancia de Lewis se ubique en el paralelo 42 y en la misma línea, pero sobre el Atlántico, haya una pista de aterrizaje para aviones de gran porte, a sólo dos horas y media de de vuelo de las Islas Malvinas”.
Asimismo, Laura Leonardi sostiene que no puede soslayarse en esta historia a qué está jugando la Presidencia Milei y vincula lo que sucede en Lago Escondido con aquello que se propicia mediante instrumentos como el Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones. “Con el Rigi pretenden legalizar todas estas irregularidades”, advierte y hace hincapié en que lo de Lago Escondido y Lewis habla de “una venta ilegal de una extensión de tierras ubicada a cincuenta kilómetros de la frontera con Chile, además se cierra un camino ancestral mapuche, utilizan nuestros bienes comunes como el agua y no nos dejan pasar al lago”. De ahí que, sin dudarlo definió que no se trata solamente de un espejo de agua y de una suntuosa mansión, ya que “lo que hay ahí es un centro de lobby de los tanques de pensamiento internacional”.
Por eso es que con este telón de fondo y en medio de un panorama atravesado por “un escenario social desmovilizante, sumido en la derrota de la llamada Tercera Vía, los comunistas junto a militantes de otras organizaciones, sindicatos, agrupaciones de ex combatientes, cristianos y de todo el campo popular, marchamos construyendo la épica de la soberanía”, porque insistió Laura Leonardi, “la épica de un movimiento no puede centrarse sólo en sus líderes… una épica tiene un programa: soberanía política, independencia económica y justicia social y marchamos por eso”.