A veintiocho años de la desaparición del estudiante de periodismo, se llevó a cabo un homenaje ante la sede policial donde fue visto por última vez con vida.
El 17 de agosto se realizó un homenaje a veintiocho años de la desaparición del estudiante de la Facultad de Periodismo, Miguel Bru, que fue visto con vida por última vez dentro de la Comisaría 9ª de La Plata.
En representación de la CTA Provincia de Buenos Aires estuvieron presentes su secretaria de Derechos Humanos y senadora Provincial, María Reigada, así como el referente del Frente Barrial, Alberto Ramírez.
Con la presencia de la madre de Miguel, Rosa Bru, militantes y dirigentes de organismos de Derechos Humanos, como Matías Moreno, subsecretario de Derechos Humanos de la Provincia y el titular de la Secretaría Nacional del área, Horacio Pietragalla, se llevó a cabo un acto y una vigilia con distintas actividades, ante la fachada de esa dependencia policial.
Al respecto Cesar Zubelet, integrante de la CTA Regional La Plata-Berisso-Ensenada-Magdalena-Punta Indio, recalcó que Miguel Brú fue detenido “por la policía de la mano dura” y recordó “el papel destacado que durante muchos años tuvo el abogado León Toto Zimerman, en la denuncia y la lucha contra esta policía del gatillo fácil”.
Tras lo que lamentó que “hoy esa fuerza de seguridad sigue sin cambiar su concepción y, en este sentido, recordó “el caso del joven de Bahía Blanca, Facundo Castro, que desaparece tras ser detenido por la policía bonaerense”.
También fue claro al denunciar que “la policía bonaerense mantiene su práctica represiva, que provoca muertes por las torturas en cárceles y comisarías, desapariciones forzadas, armado de causas, negocios ilegales y detenciones arbitrarias, entre otras cosas”.
Y señaló que “el gatillo fácil, es una de las expresiones más brutales de la impunidad policial, una forma de mostrarse por parte de esta fuerza represiva, como la dueña de la vida y el destino de las personas y, fundamentalmente, de los jóvenes”.
Finalmente, recordó que “esta es misma fuerza de seguridad que el año pasado tuvo una actitud golpista contra el gobernador Axel Kicillof, impulsada por agentes exonerados de la policía provincial, que protestaron frente al domicilio bajo la excusa de pedir aumento salarial”.