La LADH, organizaciones sociales y sindicales realizaron un festival contra el intento de desalojo del edificio Santa Cruz. “La vivienda es un derecho humano y no un negocio”, recalcó Héctor Trajtemberg.
“La gente está dispuesta a resistir”, aseveró Héctor Trajtemberg, abogado e integrante de la Liga Argentina por los Derechos Humanos (Ladh), que junto con Rosa Herrera ejerce la defensa de las familias que el Gobierno de la Ciudad quiere desalojar del edificio Santa Cruz, ubicado en el barrio de Parque Patricios.
Lo hizo durante el Festival Cultural que -el sábado pasado- llevó a cabo la Cooperativa, junto a la Lahd, la Multisectorial de Parque Patricios y el equipo multidisciplinario de la UBA, entre otras organizaciones sociales y políticas que se dieron cita para expresar su solidaridad con los vecinos del edificio.
Fue una jornada de lucha, solidaridad y de denuncia contra la orden judicial de desalojar el edificio, en la que hubo música, muralismo, murgas y otras expresiones artísticas, todo acompañado por una olla popular.
El edificio está en Santa Cruz 140, en el barrio de Parque Patricios. Cuando durante 2010 fue subastado, las familias que lo habitaban intentaron –sin éxito- obtener un crédito para comprarlo.
Quien sí pudo adquirirlo fue Leonardo Ratuschny. Pero lo significativo es que lo compró con todos sus habitantes adentro -para lo que pagó 1.550.000 pesos-, tras lo que inmediatamente inició un proceso judicial de desalojo.
Vale citar que en el edificio Santa Cruz viven aproximadamente 107 familias, por lo que más de trescientas personas quedarían en la calle si se efectiviza la orden de desalojo.
Al respecto, Trajtemberg destacó la organización y la lucha de de la cooperativa y advirtió que “el conflicto está parado pero en cualquier momento se reactiva”, tras lo que señaló que “las autoridades de la Ciudad deberían dar una solución habitacional permanente y definitiva a lo que se está reclamando”. Y fue contundente al remarcar que “la única forma de parar el desalojo es mediante la movilización popular”.
Asimismo, insistió en que “defendemos a los habitantes del edificio porque la vivienda es un derecho humano y no un negocio” y, en esta dirección, sostuvo que “intervenir en defensa de la vivienda popular debe ser una de los ejes fundamentales del Frente de Todos”.
