Es en el juicio contravencional donde fue imputado junto a otros referentes sociales, algunos de ellos condenados a pagar una multa. Todo esto a una semana de que tuviera lugar una fuerte movilización para reclamar “navidad sin hambre, en San Salvador de Jujuy.
El integrante de la FJC, Santiago Hamud, fue absuelto en el juicio contravencional iniciado el 10 de febrero contra quince militantes populares a quienes se imputó de “atentado contra la autoridad”, por un hecho que tuvo lugar cuando personas que manifestaban contra las políticas de Gerardo Morales, fueron brutalmente reprimidos por efectivos de la Policía de Jujuy, el 4 de abril de 2018.
Ese día, cuando se realizaba la apertura de las sesiones ordinarias con la presencia del gobernador Morales, ante la Legislatura se llevó a cabo una movilización en la que participaron organizaciones sociales, políticas, sindicales y de Derechos Humanos.
Pocos días después, durante operativos que hicieron durante las horas de la madrugada, integrantes de la Policía de Jujuy comandada por el ministro Ekel Meyer, detuvieron a dirigentes que habían participado de la manifestación.
A partir de ahí se abrió una causa plagada de irregularidades. Por citar sólo un ejemplo: el juez de la causa contravencional, Matías Ustarez, aceptó como válidos los testimonios de policías que intervinieron en la represión, pero impidió que la defensa de Hamud presente algunos de los que propuso, ente ellos a los integrantes del Partico Comunista Solana López y Martín Sequeira, así como a los dirigentes de la CTA Hugo Yaski, Pablo Micheli y Daniel Catalano.
Así las cosas, posteriormente se llevaron a cabo dos audiencias y se preveía que el juicio se extendiera hasta el 28 de marzo de 2020, antes de que prescribiera la causa, pero con la irrupción de la pandemia, la causa siguió abierta hasta ahora.
En este punto vale recordar que tal como lo recalcara oportunamente el abogado defensor de parte de los imputados, Luis Paz, “la ley contravencional en Jujuy tiene un tinte fascistoide”, algo que es comprensible si se advierte que entre quienes trabajaron en su redacción, aparecen Pablo Pullén Llermanos y Sergio Lello Sánchez.
Pullén Llermanos es el juez que encabeza la persecución de Milagro Sala, obsesión que comparte con el jefe de los fiscales jujeños, Sergio Lello Sánchez, quien acumula pedidos de juicios políticos en su contra.
Sin dudas estos datos ayudan a entender cuál es el telón de fondo de la causa que llevó a Hamud, junto a los otros luchadores sociales, al banquillo de los acusados.
Pero esto no es todo: ayer, la Legislatura provincial aprobó el pliego de la designación de Meyer como vocal del Superior Tribunal de Justicia, por lo que ahora el principal brazo ejecutor de la represión en Jujuy, se pondrá la toga y va a tener la responsabilidad de emitir “justicia”.
Hambre
“Fui absuelto en el juicio contravencional que llevó adelante el Gobierno Provincial contra mi persona y otros compañeros de organizaciones sociales, gremiales y políticas, por el simple hecho de haber asistido una protesta ciudadana”, recalcó Hamud a poco de que ayer se conociera la decisión del juez José Matías Uztarez Carrillo.
Pero lamentó que, “a pesar de mi absolución, no hay nada que festejar”, ya que “hay compañeros que son grandes luchadores comprometidos como el militante de nuestra organización, el MTL, Leonel Altamirano que junto a Carlos e Ivan Mercado de ATE Verde y Blanca, y el dirigente del Movimiento Evita José Surita, entre otros, que fueron condenados a pagar una absurda multa de 150 mil pesos”.
Vale citar que Uztarez Carrillo es un militante de la UCR, que, en 2016, fue designado juez por el gobernador Morales. “Las intenciones de Morales son las de castigar y tratar de acallar las voces de quienes no le permiten seguir con tarifazos, congelamiento salarial, negociados y con cárcel a los presos políticos de Jujuy”, señala una declaración que ATE Jujuy hizo pública esta semana para referirse al juicio.
En el mismo sentido, Hamud hizo hincapié en que “no es casual que el emperador (Morales) nos cite justo ahora que pusimos en marcha un plan de lucha por una navidad sin hambre en nuestros barrios”.
Tras lo que fue claro cuando recalcó que el gobernador de Jujuy “tiene que entender que no hay causa, persecución ni aprietes que nos haga bajar las banderas de lucha por una vida digna”.
Los dichos de Hamud nada tienen de antojadizos. Hace una semana tuvo lugar, en la ciudad de San Salvador, una contundente movilización convocada por organizaciones sociales que marcharon bajo la consigna “Por una navidad sin hambre”.
Hamud estuvo entre quienes estuvieron al frente de las columnas que se dirigieron hacia la sede de la Secretaría de Seguridad Alimentaria. Ahí se protestó, entre otras cosas, porque el gobierno no atiende la necesidad de los merenderos y comedores populares en los que, durante los últimos meses, se duplicó la asistencia.
“Estamos reclamando respuestas al pedido que hicimos hace más de un mes, solicitando asistencia alimentaria para todos los comedores y merenderos que tenemos en la provincia”, explicó el referente de la FJC y el MTL, tras lo que recordó que la partida presupuestaria de catorce pesos por persona que en teoría se asigna a comedores y merenderos “es miserable”. Y peor todavía: “los distintos comedores que estamos acá no recibimos ni siquiera eso, no recibimos nada”.
Aquí hay que advertir que, de acuerdo a los relevamientos del Indec, en Jujuy la pobreza creció respecto a la registrada durante 2019, para alcanzar al 38 por ciento de la población. Es dato es todavía más alarmante cuando se toma el desagregado de la zona Jujuy-Palpalá, donde hay 131.452 de personas que viven en la pobreza y 16.501 subsisten en condiciones de indigencia. “Es una situación insostenible, hay hambre y miseria y el gobierno provincial no hace nada”, lamentó Hamud.