Con este título inauguramos esta sección de Nuestra Propuesta, que reflexionará sobre este momento clave para la Primera Independencia Nuestroamericana, del que en diciembre se cumplirá el segundo centenario. Pensar en las luchas que confluyeron en el proceso de la Primera Independencia de Nuestra América, vuelve necesario posar la mirada sobre la Batalla de Ayacucho que constituye un hito determinante para ese momento, al tiempo que establece su capítulo final.
Por eso es que resulta un detonante apropiado para repasar cuáles fueron los actores, circunstancias y situaciones que convergieron en ese episodio, pero asimismo plantea una oportunidad relevante para reflexionar acerca de la proyección que tiene sobre la difícil situación que atraviesan nuestro país y la región.
¿Qué fue Ayacucho? ¿Cómo se puede leer lo que pasó aquel 9 de diciembre de 1824 en la Pampa de Quinua? ¿Cuáles fueron los factores que determinaron lo que acabó por desencadenarse ese día? ¿Qué fue lo que se cerró durante esa jornada y qué es lo que aún permanece abierto?
Así las cosas, pensar en la Batalla de Ayacucho invita a actualizar la mirada sobre quienes durante la primera mitad del siglo 19, con marchas y contramarchas, con convicción y compromiso pusieron sobre sus hombros la lucha por la liberación y la independencia, una tarea inconclusa que se proyecta hacia lo que debe construirse como lo que deberá ser la Segunda y Definitiva Independencia.
Por eso y como un aporte a debates que son tan actuales, el diario del Partido Comunista, convocó a participar en esta sección a autores que desde diferentes puntos de Nuestra América, van a sumar sus miradas y perspectivas sobre esta problemática. Esperamos que este nuevo segmento sea capaz de recoger, con justicia, los ecos de aquella verdadera gesta y que por lo tanto sea del agrado de los lectores de Nuestra Propuesta.
