El ejecutivo municipal de Mar del Plata cortó el envió de alimentos a los comités Barriales de Emergencia y sigue sin aplicar controles a la circulación de personas.
Con apoyo de las centrales de trabajadores, los Comités Barriales de Emergencia (CBE) denunciaron nuevamente que el Municipio de General Pueyrredón recortó la asistencia a los comedores de Mar del Plata, en medio de la pandemia.
Además, teniendo casi trescientos casos por día en esa ciudad, el intendente Guillermo Montenegro, no efectúa controles sanitarios para frenar la propagación del Covid-19, pero que los barrios son un foco importante de contagios. Todo en Mar del Plata, que es la ciudad que presenta la tercera en la taza de mayor desempleo del país.
La reiterada desidia estatal de la gestión de Juntos por el Cambio, hace que muchos comedores de los barrios más económicamente vulnerados, estén cerrados por la presencia de casos de Covid-19. Esto provoca que se esfume la posibilidad de que muchas personas puedan acceder a comer.
Desde el inicio de la pandemia se acumulan en Mar del Plata más de 54 mil casos de coronavirus, de los cuales 3.376 están activos y al menos 1.637 personas murieron por este motivo.
Al respecto el secretario del Partido Comunista de Mar del Plata, Pedro Ferrer, recalcó que el intendente Montenegro no da ninguna respuesta favorable a la alarmante situación sanitaria que presentan los comedores de esa ciudad.
“La situación en los barrios es muy complicada”, lamentó Ferrer y advirtió que pese a esto “hace dos semanas no se entregan alimentos”, por lo que a la crisis sanitaria y alimentaria “la mayoría de los comedores permanecen cerrados”.
De aquí que el secretario del PC marplatense, destaque que “debe crearse un comité de crisis donde estén integradas toda las organizaciones sociales” y demande que “los compañeros que trabajan en comedores y merenderos sean declarados urgentemente esenciales para que puedan ser vacunados”.
Así las cosas, la crisis que atraviesa Mar del Plata, es evidente. “Las fabricas cierran por contagios y por la falta de demanda, lo que también puede verse en la gran cantidad de comercios que han cerrado en la ciudad”, lamentó Ferrer.
Por lo que “debemos luchar por un plan estratégico de inversión en la industria marplatense, que incluya una revalorización del puerto, donde la mitad de los trabajadores está en negro”.