Declaración del Partido Comunista - El Secretariado Nacional del PC fijó su postura por medio de un documento que se transcribe a continuación.
La crisis del capitalismo argentino está siendo agravada y agigantada por la voracidad sin límites del grupo de corporaciones que están en el gobierno y ostentan la suma del poder público al controlar el ejecutivo y el judicial, alcanzar complicidades parlamentarias, dominar los resortes principales de la economía, la fuerza represiva del Estado y la enorme mayoría de los medios de comunicación.
Al adueñarse del gobierno desarrollaron una espiral especulativa que pone al país al borde de la bancarrota, a través del desguace de las funciones sociales del Estado, de un feroz e ilegal endeudamiento externo, de un proceso de quiebra del aparato productivo y científico-tecnológico y de entrega de la soberanía nacional, tanto en lo que hace a la defensa de nuestras riquezas naturales, como del traslado de la toma de decisiones que nos afectan a tod@s, al Fondo Monetario Internacional.
Una descarada fuga de divisas se practica junto a la renuncia de nuestros derechos soberanos sobre las Islas Malvinas y la introducción de tropas y bases de EE.UU. en el territorio nacional. La política exterior ha sido puesta al servicio de los planes injerencistas de Washigton y de sus intentos por destruir los avances que se habían alcanzado en la unidad en integración latinoamericana y caribeña.
La vida cotidiana se ha dificultado agudamente para la mayoría de la población que, junto a la creciente carestía de la vida, ve caer el poder adquisitivo de sus ingresos. Ya se registran bolsones de hambre y crece el desempleo tanto en el sector privado como en el estatal.
Un pequeño grupo de corporaciones de los sectores financiero, minero, energético y agroexportador y “los amigos del presidente”, se han enriquecido en millones de dólares a costa del dolor del pueblo. Es de estos lugares de donde se deben obtener los fondos para un desarrollo nacional con justicia social, en cambio de seguir ajustando y comprimiendo los bolsillos de l@s trabajador@s.
No se trata de errores ni de un fracaso de gestión. Si bien el neoliberalismo / neolcolonialismo se demuestra como un proyecto inviable de Nación, todo este desastre ha sido cuidadosamente planificado en función de los intereses de la oligarquía y el imperialismo. Es la más grande y odiosa de todas las corrupciones.
La situación ha alcanzado niveles de crisis política.
El discurso del gobierno de “volver al mundo”, de “seguir a los mercados”, de reducir el déficit fiscal, del “sacrificio de todos” se agota. Los grupos poderosos han dado “golpes de mercado”, especialmente cambiarios, reclamando ajustes y recortes aun mayores. El intento de reestructuración del gabinete ha fracasado.
El pueblo, que ha demostrado una fuerte capacidad de movilización en las calles y los lugares de trabajo y estudio, es quien tiene ahora la palabra.
Llamamos a sostener, apuntalar y desarrollar todas las luchas y a conformar un centro unido que las coordine, potencie y que reclame cuanto antes las soluciones necesarias.
Es necesario un Plan de Emergencia Integral de reparación de los daños causados al pueblo en materia social, salarial, educacional, sanitaria, etc. El gobierno actúa en forma diaria y si bien debemos aportar también a una alternativa electoral, nosotros no podemos esperar hasta 2019. La crisis exige hoy adelantar el paro nacional y las jornadas de lucha ya convocadas.
Debemos exigir la renuncia de Mauricio Macri y que un gobierno provisional convoque a elecciones anticipadas para encauzar al país. Consideramos necesario abrir paso a la forja de una nueva Constitución que reafirme la soberanía del pueblo, la independencia nacional, un desarrollo con justicia social. Y que imponga la ruptura de los compromisos antinacionales que ha asumido el macrismo.
Ello refuerza la necesidad urgente de erguir una amplia y poderosa alternativa política al macrismo, plural y participativa, a la cual se viene aportando desde diversos plenarios realizados en este último tiempo, para la cual el Partido Comunista contribuirá desde su militancia en todos los rincones del país con un programa de transformaciones de fondo para cambiar de una vez las estructuras retrógradas del país y avanzar hacia la liberación nacional y social.