Son dos sentimientos que describen lo que dejó el 28 Congreso, tal como lo señala Federico Nanzer quien plantea que “el desafío es tomar el ejemplo de la dirección histórica del Viraje del 16 Congreso y animarnos a seguir construyendo el Partido”.
“Fue una tremenda emoción y un orgullo muy importante ver que somos una fuerza política que discute, que está viva, que se reúne y tiene representaciones sindicales, sociales, de Derechos Humanos, estudiantiles, territoriales y de la política”, dijo el titular del Partido Comunista de Córdoba, Federico Nanzer, al hacer un análisis preliminar del 28 Congreso que lo tuvo como uno de los diez integrantes que representaron a su regional.
“Vimos un partido vivo, con convicciones y discusión, que construye conceptos y teoría”, así como “un enfoque político para desatar un proceso revolucionario en Argentina”, celebró y destacó que el Congreso haya delineado una hoja de ruta por medio de “resoluciones que tienen que ver con el corto, mediano y largo plazo, que trazan la política del PC”.
Y, asimismo, remarcó que “se aprobara y se reafirmara un enfoque de la perspectiva socialista de la revolución de liberación nacional de Argentina y la necesidad de la unidad respetando las distintas identidades de nuestro pueblo, para construir una alternativa revolucionaria que a partir de la construcción de una nueva mayoría, en lo inmediato, saque por las buenas o por las malas a Milei del gobierno”, tal como dijo el flamante secretario general Jorge Alberto Kreyness. Pero que también, puntualizó Nanzer, “en un segundo momento y el paralelo, genere al decir de García Linera, una oleada de carácter revolucionario que cada vez intente ir más allá que en el repliegue anterior”.
Así las cosas, el secretario Político del PC cordobés hizo hincapié en que “hay que construir una nueva mayoría del pueblo, que debe tener un programa y un carácter antiimperialista y anticapitalista, que por lo tanto no puede definirse de otra manera que no sea como de rumbo hacia el socialismo”. Y, en este sentido, recalcó el amplio abanico que estuvo representado en el 28 Congreso. “Se reflejó un Partido con jóvenes, profesionales y obreros, jubilados e intelectuales” que, además, “fue rodeado por otras fuerzas del campo popular como quedó claro en el acto de apertura”.
Pero por otra parte, se mostró optimista porque “se vio un PC que se reinventa a sí mismo y que no para de inventarse en forma permanente y que eligió un Comité Central que es acorde al tiempo, a la época y al tamaño del Partido, y lo hizo de manera unánime con una votación a mano alzada y por aclamación”.
Un Comité Central que, puntualizó, “va a tener la tarea de llevar adelante todo lo que desarrollamos después y que para eso eligió a Jorge Kreyness”, al tiempo que plantea “el desafío para una generación política que tomando el ejemplo de la dirección histórica del Viraje del 16 Congreso pueda, se anime y deba seguir construyendo el Partido, lo que representa una responsabilidad que nos delegaron cientos de compañeros”.