“Hay que dar pelea porque no se puede vivir con hambre”, recalcó el coordinador nacional del MTL, Gustavo Muñoz, al referirse a las cinco mil toneladas de alimentos que la Presidencia Milei está dejando que se venzan en galpones. El martes se instala frente al Congreso Nacional la Carpa contra el Hambre.
Primero negaron que estaban reteniendo alimentos y cuando no pudieron ocultar más lo que hay en al menos dos depósitos, argumentaron que se trataba de reservas destinadas a la asistencia de catástrofes, aunque desde que Javier Milei está en La Rosada ya hubo tres y en ninguno de los casos el gobierno nacional entregó ni un paquete de fideos a los damnificados.
Pero la cosa comenzó a espárceles de las manos por la creciente presión popular, conforme se conocían detalles de la investigación periodística de Ari Lijalad y avanzaba la investigación que se originó con la denuncia penal que, al respecto, hizo Juan Grabois y que impulsó el juez Sebastián Casanello quien ordenó al Ministerio de Capital Humano que en un plazo de 72 horas, informe sobre la cantidad de productos alimenticios que tiene stockeados, pero también que establezca “de inmediato” un esquema que permita su distribución.
El gobierno se abroqueló en torno a Sandra Petovello y el propio vocero presidencial, Manuel Adorni, aseveró a principios de semana que iba a ser apelada la medida judicial, hasta que no le quedó otra que recular ante lo abrumador de los datos que surgieron del informe que exigió Casanello y la movilización de movimientos sociales hacia el galpón de Villa Martelli que es uno de los dos incluidos en la denuncia.
Vale decir que además de intentar ocultar las al menos cinco mil toneladas de comida que se había adquirido durante su último mes el gobierno encabezado por Alberto Fernández, la Presidencia Milei hizo lo propio con vehículos destinados al esquema de asistencia social, materiales de construcción, colchones y hasta repelente para mosquitos.
Pero no sólo esto. Del informe que la cartera a cargo de Petovello tuvo que entregar, se desprende que se dejó vencer buena parte de la mercadería y que otro tanto tiene vencimiento para junio y julio. Ahí se reconoce que 30.240 kilos de leche en polvo de los depositados en los galpones de Villa Martelli y Tafí Viejo, vencen el 7 de julio y que otros 314.066 lo hacen el 30 del mismo mes. Y si se tiene en cuenta que un kilo de leche en polvo rinde diez litros de leche fluida que se puede estirar -según la necesidad- a hasta catorce litros, se deduce que hay cuatro millones de litros de leche que difícilmente se puedan llegar a consumir antes de que estén vencidos, así como alrededor de doce millones de litros cuyo vencimiento será dentro de los próximos siete meses.
Con este telón de fondo las cosas se precipitaron y ayer por la tarde tuvo que renunciar el Secretario de Salud y Bienestar Familiar a quien un comunicado del Ministerio le echó la culpa. “Se ha decidido limitar las competencias de los funcionarios y empleados responsables que, por mal desempeño de sus tareas, no han realizado un control permanente de stock y de vencimiento de mercadería”, señala el texto sin nombrar al renunciante Pablo de la Torre quien antes de ser uno de losa acólitos de Milei, ya había pasado por las filas del kirchnerismo, el massismo y el macrismo.
Ahora, Petovello intenta calmar las aguas con esta “auditoría”, dándole salida a De la Torre y anunciando que a la comida “que esté próxima a vencer” la va a repartir en breve personal del Ejército. Pero nada dice acerca de si la Presidencia Milei piensa reponer la mercadería que, de acuerdo al escenario de noviembre de 2023 cuando fue adquirida, alcanzaba para paliar la situación de comedores y merenderos populares durante un mes.
Pero desde entonces el panorama empeoró drásticamente, merced a la devaluación del 119 por ciento y la desregulación de todos los precios de la economía que, con excepción del salario que sigue pisado, perpetró el gobierno nacional. Esto fue determinante para que tal como lo revela un reciente informe del Observatorio de la Deuda Social de la UCA, el 55 por ciento de los argentinos sean pobres, en tanto que la indigencia se duplicó desde entonces hasta alcanzar al 18 por ciento de la población.
Por eso es que queda claro es que, si el juez Casanello decide hincar el chichillo a hueso, De la Torre y Petovello van a tener que dar varias explicaciones más, ya que la denuncia que hizo Grabois puede derivar en la apertura de una imputación penal que en el caso de la ministra de Capital Humano, podría sumarse a la acusación que la semana pasada se le hizo por el armado de una caja paralela de sobresueldos dentro de la cartera a su cargo.
Las ollas no dan abasto
El MTL sostiene alrededor de 250 comedores y merenderos distribuidos en diferentes puntos del país, pero en ninguno de los casos recibe asistencia del Estado Nacional desde noviembre de 2023. Por sus integrantes fueron de la partida en la movilización que esta semana se llevó a cabo ante el depósito ubicado en Villa Martelli, ante donde también se prevé que el padre Paco Olveira y otros religiosos comiencen el martes una huelga de hambre si el Ministerio de Capital Humano no distribuye los alimentos.
Y en medio de este contexto, el martes desde la hora 11, va a instalarse frente al Congreso Nacional la Carpa contra el Hambre, convocada entre otras organizaciones por el Movimiento Territorial Liberación, el Frente Barrial de la CTA y el Frente Nacional Contra la Pobreza. “La idea es instalarla una vez por semana, con la perspectiva de después poder hacerlo todos los días”, informó el coordinador nacional del MTL, Gustavo Muñoz, quien añadió que “aunque sabemos que el gobierno va a resistirse a que lo hagamos, esto es algo necesario ya que la situación es muy compleja” y adelantó que también va a emplazarse una Radio Abierta y una Olla Popular, “para que cualquier vecino que pase por ahí y lo necesite pueda retirar un plato de comida caliente”.
Así las cosas, Muñoz fue contundente cuando dijo que “es una burla que, mientras el pueblo se muere de hambre, estén dejando pudrir la comida en esos depósitos” y recalcó que “es algo totalmente inhumano lo que hace justamente el área de Capital Humano, que poco tiene de humana”.
Y en este sentido, hizo hincapié en que la situación que atraviesan los comedores y merenderos populares, es alarmante ya que no reciben nada por parte del Estado Nacional desde que Milei es Presidente. “Es todo muy complejo porque la demanda que hay es terrible, es mucho más que la que teníamos hace dos o tres meses y, encima, el gobierno nos viene persiguiendo a todos los comedores”.
Es que en este marco, la maniobra gubernamental consiste en un fuerte pustch contra los movimientos sociales que desde el mismo momento en que Milei entró a La Rosada, encabeza la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, que al más puro estilo lawfare, tiene una pata en la industria massmediática dominante y otra en el Poder Judicial.
Las denuncias y persecución que se multiplican desde entonces, tiene un hilo conductor con el caso de las cinco mil toneladas de alimentos retenidas, el congelamiento del monto de los programas sociales y la baja de miles de personas que accedían a ellos. Pero fundamentalmente, persigue un objetivo pedagógico, que está vinculado directamente a la necesidad que la clase capitalista que actúa por medio del Gobierno Milei, tiene de disciplinar al sector de los trabajadores que desde hace muchos años viene actuando en la primera línea de la trinchera, ahí donde se atiene la primera necesidad que el Estado Liberal Burgués no satisface, como es la alimentación.
Y, entones, es por eso que doblegar a este sector que por otra parte es el que con mayor dinamismo se viene plantando contra el ajuste que perpetra la Presidencia Milei desde su primer día, representa un objetivo de alto impacto para la clase capitalista.
“Me vienen siguiendo sistemáticamente, en la casa de mi pareja, en mi casa, en el local del Partido de Moreno, soy hostigado permanentemente”, denunció Muñoz y advirtió que “nos está investigando un gobierno que nunca nos dio nada, absolutamente nada, y que encima miente porque somos de los espacios que con todas las dificultades, seguimos sosteniendo la olla con la mayor demanda que hay en estos días”.
Es que más allá de la persecución montada por el gobierno y del coro que tiene entre las propaladoras massmediáticas y de redes sociales, la necesidad es algo cotidiano, sobre todo cuando de lo que se trata es de comer. “Hoy vas a ver en las ollas gente que nunca había venido, es algo de lo que te das cuenta, porque ves que hasta les da vergüenza a veces: compañeros y compañeras jubiladas, empleados públicos y privados a los que ya no les está alcanzando lo que les pagan, nuestros vecinos, nuestras familias, nuestros compañeros porque el que tiene suerte, tiene una comida diaria que normalmente es la cena”, es panorama que cotidianamente atiende el MTL.
Por eso, puntualiza Muñoz, “con el resto de las fuerzas nos organizamos en el territorio para hacer ollas distintos días, cosa que a esa cena la puedan tener la mayoría de las familias”. Y entonces resulta “totalmente increíble que estos personajes, estos tipos nefastos y neofascistas, tengan terrible cantidad de alimentos a punto de vencerse metidos en depósitos desde el primer día que comenzó su gobierno”.
Pero también aunque asume que “no les podemos pedir que tengan la sensibilidad que han demostrado que no tienen”, ahora lo novedoso es que “se le está parando de manos el Poder Judicial que siempre le respondió a ellos”. Y tras alertar que “creo que esto puede desencadenar en una pelea que puede terminar con una rebelión popular”, reflexionó que “no se puede poner fecha en esto y aparte se sabe que en esas peleas siempre las víctimas las pone el campo popular, pero esto ya no se puede sostener: camino el territorio día a día y la verdad es que la situación es cada vez más compleja”.
Mientras tanto, desde EE.UU. donde sigue haciendo turismo sin agenda oficial y a costillas del erario público, Milei aseguró que no es problema de su gobierno atender la problemática del hambre que atraviesa hoy a nuestro país, ya que las personas que están en esa situación, “de alguna manera van a decidir algo para no morirse”.
No es la primera vez que Milei hace públicas declaraciones de ese tenor, pero no dejan de constituir “una burla que va haciendo que la gente crea cada vez menos en él”, reflexionó Muñoz y lamentó que “contradictoriamente todavía hay inclusive algunos que se están cagando de hambre y tienen esperanza en su gobierno”, por lo que habrá que analizar por qué pasa eso, qué errores han cometido los gobiernos llamados populares para que todavía se siga creyendo en estas cosas”.
Y después de recordar que “en cada momento de crisis hemos salidos a poner lo que hay que poner, tal como lo hacemos ahora”, insistió con que “la situación es cada vez más insostenible y mientras nos hambrean entregan los recursos naturales”, por lo que “hay que dar esta pelea porque no se puede vivir con hambre”.