Sidebar

[Offcanvas] Navegación superior

27
Sáb, Abr
87 New Articles

Mundo
Typography
  • Smaller Small Medium Big Bigger
  • Default Helvetica Segoe Georgia Times

El Estado de Israel y el bolsonarismo fustigan al presidente de Brasil porque denunció la masacre que Tel-Aviv perpetra en la Franja de Gaza.

Durante los últimos días, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, tuvo dos actitudes que le valieron que el Estado de Israel lo declare “persona no grata”. En Etiopía donde participó como invitado en una cumbre de la Unión Africana, señaló que lo que se perpetra en la Franja de Gaza es un genocidio y adelantó que su país va a aumentar las donaciones que realiza a la Agencia de Obras Públicas y Socorro de la ONU para los Refugiados Palestinos (Unrwa), que viene sufriendo un duro ataque por parte de Tel-Aviv y Washington (Ver Quieren dejar sin ayuda humanitaria a Palestina).

“Lo que está ocurriendo en la Franja de Gaza con el pueblo palestino no ha existido en ningún otro momento histórico, en realidad sí ha ocurrido: cuando Hitler decidió matar a los judíos”, dijo el mandatario al referirse a la masacre que perpetra desde octubre pasado el Estado de Israel en esa región palestina, que ya dejó un saldo de alrededor de treinta mil personas asesinadas, de acuerdo a datos provisorios, ya que resulta sensato pensar que esa cifra se va a incrementar cuando se puedan exhumar los cadáveres de quienes quedan atrapados bajo los escombros a los que los ataques sionistas están reduciendo a las ciudades de la Franja.

Así las cosas y ante la reacción israelí por los dichos de Lula, desde el Palacio Itamaraty se convocó a consultas al embajador brasilero ante Israel, mientras que la extrema derecha local se alineó rápidamente con la postura del gobierno presidido por el primer ministro Benjamin Netanyahu y anunció que va a impulsar el juicio político contra el Presidente Da Silva porque, de acuerdo a su particular mirada, “expone a Brasil al riesgo de una guerra con una nación extranjera”, en este caso Israel.

Por otra parte, el abogado que representa a Jair Bolsonaro, invitó al embajador de Brasil en Israel, Frederico Meyer, a participar de una marcha que el ex presidente convocó para el próximo domingo en San Pablo, para denunciar que si se lo investiga por su participación en el intento de golpe de Estado de enero de 2023, se lo estaría persiguiendo.

Con este telón de fondo, el Partido Comunista do Brasil (PdoB), no ocultó su apoyo a la postura de Lula y recalcó que “el mundo observa con indignación y disgusto la continua masacre llevada a cabo por el Estado de Israel contra el pueblo palestino” que, hizo hincapié, “sufre un genocidio planeado”.

Y recordó que al pedir un alto el fuego, que se inicien negociaciones de paz y la formación de un Estado palestino independiente, el presidente de Brasil “hace propuestas que representan la esencia de su postura y están en plena conformidad con los preceptos del artículo 4 de la Constitución de la República, que define los principios básicos de nuestra política exterior, incluida la defensa de la paz y la solución negociada de los conflictos”.

Asimismo, el PCdoB advirtió que “cada día que pasa, el intento de limpieza étnica en Palestina, mediante asesinatos en masa, avanza con impunidad”, por lo que resulta “urgente desenmascarar y condenar a Benjamín Netanyahu y a otros responsables de la matanza de civiles y la ocupación criminal del territorio palestino y, en este sentido, se debe decir la verdad dura, incómoda, pero necesaria, como lo hizo el Presidente Lula”.