Como parte de la Columna Juana Azurduy, el PC aportó a la Marcha por la Soberanía a Lago Escondido que debió ser redireccionarse a raíz de los incendios. En esta columna uno de sus integrantes, Pablo Morén, reflexionó sobre lo sucedido y lo que pasa ahora mismo en la Patagonia.
Me queda una sensación extraña, aún no puedo creer todo lo que sucedió. Ver lugares totalmente quemados por los cuales íbamos a pasar me resulta fuerte. La primera reacción o análisis de los hechos basándome en la información de camaradas, compañeros que llegaron a El Bolsón, es que el problema tiene varias aristas de las cuales las dos más importantes son la codicia por las tierras y la falta de políticas públicas, sumado a un cambio climático que es innegable a esta altura, teniendo en cuenta la sequedad que había en la zona, las elevadas temperaturas.
Al mencionar esto quiere destacar el desarmado de todas las leyes, las regulaciones estatales en materia legislativa llevada adelante por el gobierno nacional que abre las puertas a múltiples sospechas sobre actores políticos económicos que actúan en la zona.
Por otro lado me queda de positivo la organización comunal de El Bolsón para combatir los incendios, Los Brigadistas, héroes y heroínas movidos por el amor al entorno natural que tal vez con poco recursos y tal vez poca instrucción pone en riesgo su vida en defensa de los bienes comunes de todos, en este caso el hermoso y milenario bosque andino de la comarca andina.
Eso me parece que en estos tiempos de lucha ambiental es a destacar y a destacar mucho pero a la vez estos héroes y heroínas me remiten a lo anterior a la falta a la desidia por parte del Estado o como dice un camarada de Bariloche: “Si, el Estado está pero para los más poderosos”.
Como tercera sensación, y esta es positiva, me queda que casi veinte camaradas de nuestro partido y de diversas partes del país marcharían en defensa de la soberanía.
Este hecho es muy importante ya que comienza una tradición, un compromiso de nuestro Partido para con esta lucha, lucha que hay que sostener con creatividad pero sobre todo poniéndole el cuerpo y la mente. Nos organizamos, con todo lo que lleva esto: viajes, equipamientos, logística de alimentos, relaciones políticas con las demás organizaciones que integran la Columna Juana Azurduy y eso es a destacar ya que dentro de la columna somos de los más numerosos e insisto esto es a destacar y a redoblar esfuerzos para el resto del año.
Al momento que comenzaron los incendios en las proximidades al Bolsón, había muy pocos compañeros que estaban en camino hacia el sur. Al intensificarse los incendios el grueso de marchantes que partíamos al otro día decidimos en forma colectiva esperar ya que la gravedad del siniestro había escalado. Armamos una asamblea virtual para poner en palabra lo que sentíamos y analizar los pasos a seguir.
Ahí fue muy importante la palabra de la compañera secretaria general de la CTA A de El Bolsón, contándonos los ataques que recibía en forma virtual por la proximidad de la Marcha por la Soberanía y que los incendios estaban fuera de control. Que lo mejor era suspender la marcha o redireccionarla dando una mano en lo que se pueda a la comunidad. Absolutamente todos los marchantes entendimos que si que había que suspender y poner a disposición los fondos económicos que la columna tenía para la logística de la marcha, con esos fondos se pudieron comprar dos motobombas y ponerlos rápidamente a disposición de los brigadistas.
Estos dos hechos fueron acertados, el reclamo soberano sobre el lago Escondido y el libre acceso que debe tener nuestro pueblo no va a ceder, pero en forma colectiva entendimos que había que ponernos a disposición de la gente de El Bolsón que tan bien recibe a los marchantes de diferentes partes del país.
Contexto
La semana previa y ya cuando se desarrollaban los incendios hubo diferentes hechos que me hicieron prestar atención, que tal vez no tengan entre ellos relación alguna, pero que insisto me llamaron la atención: el buque británico surcando aguas argentinas en el canal de Beagle, la fiesta electrónica ilegal que realizaron jóvenes israelíes en Tierra del Fuego, la autorización por parte del gobierno de Río Negro para realizar dos represas a capitales qataríes, la adquisición de la pista de aterrizaje que pertenecía a Lewis por capitales qataríes también.
Una vez generado el siniestro la reacción de las fuerzas represivas deteniendo a tres brigadistas y la reacción popular para liberarlos que terminó con gauchos pegándole a los manifestantes o mismo gauchos impidiendo que los pocos aviones hidrantes pudieran despegar. Todos, todos estos hechos me hacen pensar, sumado a la noticia difundida por periodistas chilenos de que en un diario de Israel se pusieron a venta lotes de tierra de ambos lados de la cordillera.
Muchos hechos difícil de explicar para tan poco tiempo que por lo menos hace que estemos atentos a todo lo que sucede en nuestro sur. No hablo de conspiraciones si de estar atento a todo lo que sucede y esto también nos obliga a estudiar a comprender que es muy difícil que el pueblo mapuche ataque a la naturaleza ya que desde su cosmovisión del mundo esto no puede ser ya que como todo pueblo originario de Nuestramérica tiene una relación muy importante con su entorno natural y su biodiversidad, pero al decir esto también al estudiar historia sabemos de los atentados de falsa bandera, que tal vez los podemos traspolar aquí o que por lo menos es el discurso dominante en relación a los incendios insisto cuestionar todo lo que nos llega desde los medios hegemónicos de comunicación es la tarea de todo comunista de todo militante del campo popular y por ende estudiar, en este caso todo lo que respecta a la geopolítica de la Patagonia, los actores políticos, los económicos, los capitales que se invierten, las organizaciones populares, las organizaciones ambientales, hasta los conceptos a la hora de hablar.
No podemos utilizar términos del neoliberalismo como recursos naturales al hablar de la naturaleza, de un bosque, del agua esos son bienes comunes nos pertenecen a todos no se pueden comercializar por ende el Estado debe protegerlo y no desde lo discursivo sino con presencia en el territorio, haciendo cumplir las leyes: Lago Escondido como fue adquirido por un extranjero viola leyes constitucionales y esto no puede ser para un país con tantos bienes comunes que deben ser usados respetando la propia conservación de estos bienes que nos pertenecen a todos.
Retomando el tema, tal vez suene fuerte pero entiendo que la Patagonia estuvo y está bajo asedio por eso la Marcha por la Soberanía en la cual la cual visibiliza estos problemas de soberanía en nuestro territorio que obvio no son exclusivos de esta región, podemos hablar del Paraná, del litio, de la producción nuclear, de las aguas del Atlántico sur, de los esteros del Iberá, de la Antártida y para eso necesitamos un Estado fuerte, funcionarios dispuestos a defender las leyes que benefician al pueblo y a su entorno natural y militantes críticos y estudiosos es por esto que estoy muy orgulloso de mis camaradas de los que marcharían por primera vez de los camaradas de Río Negro que nos brinda apoyo logístico desde un techo hasta un mate caliente, de los camaradas de los medios de comunicación alternativos a lo largo y ancho del país, raudos y predispuestos para hacer una nota y difundir la participación de los comunistas en la Marcha por la Soberanía al Lago Escondido.
Así como también y en especial a los compañeros y compañeras de mi querida agrupación: La Violeta que lo largo del año se pusieron la película “Lago Escondido, Soberanía en Juego” de Camilo Gómez Montero y la difundieron en casi todas las seccionales del Suteba de la provincia de Buenos Aires y en otras partes del país como Entre Ríos, La Rioja, Santa Fe, Ciudad de Buenos Aires, mostrando el film como lo que es a esta altura una película de culto que invita a la reflexión pedagógica y al fraterno debate político. Por todo esto y a pesar de todo, esta experiencia sirvió, sirvió de mucho y deja mucho trabajo por delante.