El aniversario del nacimiento de Simón Bolívar reunió a delegados de cuarenta países de todo el mundo que reflexionaron sobre la vigencia del pensamiento del Libertador nuestroamericano. Ahí estuvo Norberto Galiotti, Coordinador Continental de la Red de Solidaridad con Cuba y las Causas Justas, quien señaló que “lo que expresa brutalmente el designado embajador estadounidense en Argentina exhibe el propósito histórico de Estados Unidos en nuestro continente”.
Invitado a Caracas para participar en el simposio que se llevó a cabo en el marco del 242 aniversario del nacimiento de Simón Bolívar, organizado por el instituto homónimo bajo la consigna “Por una humanidad más humana y por el equilibrio del mundo”, el Coordinador Continental de la Red de Solidaridad con Cuba y las Causas Justas, Norberto Champa Galiotti, resaltó la importancia de “analizar las perspectivas de América Latina y el Caribe a partir del pensamiento y la acción de bolivarianas”.
Del encuentro participaron 140 delegados de cuarenta países, entre ellos dirigentes políticos, sociales y sindicales, también intelectuales, en tanto que en simultáneo se hizo un encuentro de Alba Movimientos, tras lo que todos confluyeron en la Cumbre de los Pueblos por la Paz y contra la Guerra, organizada por el Partido Socialista Unido de Venezuela.
Tal como lo describió Galiotti, se trató de “un momento de debate e intercambio importante en el que se destacó la idea de que la primera independencia de los pueblos de Nuestra América quedó inconclusa”, por lo que “como parte de su continuidad histórica debemos seguir luchando contra el colonialismo de este siglo, que sigue teniendo una fuerte presencia en el continente”. En este simposio internacional también se abordó la necesidad de profundizar los caminos para avanzar hacia un desarrollo común y una humanidad más humana.
Por otra parte, Galiotti reflexionó sobre las recientes declaraciones del designado embajador de EE.UU. ante la Argentina, Peter Lamelas. “Esto es parte de un plan histórico de Estados Unidos”, resaltó y advirtió que “podemos hablar de la Doctrina Monroe, pero hay que decir que eso fue precedido por una cosmovisión que nace con la independencia de aquel país”, ya que hay una carta del tercer presidente estadounidense, Thomas Jefferson, escrita en enero de 1786, en la que señala que “nuestra confederación debe ser considerada como el nido desde el cual toda América, la del norte y la del sur, han de poblarse, así tengamos buen cuidado, por el interés de este gran continente de no expulsar demasiado pronto a los españoles, pues aquellos países no pueden estar en mejores manos”.
En dicha declaración de principios del imperialismo yanqui, recuerda Galiotti, también se expresaba su “temor de que España sea demasiado débil para mantener su dominación sobre ellos, hasta que nuestra población haya avanzado lo suficiente para ganarles el dominio palmo a palmo”.
En base a lo cual, el también secretario del Partido Comunista santafesino y miembro del Comité Central partidario, puntualizó que “ya por entonces Jefferson planteó esa estrategia que exhibe cuál es el propósito histórico de los Estados Unidos, que es la misma estrategia que viene llevando adelante el gobierno de Donald Trump con personajes como Marco Rubio y que expresa brutalmente el designado embajador estadounidense en Argentina”.
Después de advertir que los dichos de Lamelas constituyen “un hecho realmente grave”, insistió en que “forman parte de un mismo esquema que comenzó hace más de doscientos años” y remarcó que “todo lo que vino después está en la misma línea: la desconsideración de los procesos revolucionarios y de independencia de nuestro continente y la necesidad de imponer este pensamiento que es el que guía a EE.UU. a lo largo de su historia y que, entre otros, tiene hitos con la Alianza para el Progreso, el Alca y la Alianza del Pacífico”.
Fue en este contexto en el que recordó que cuando el ejército español ya estaba derrotado en Cuba, en 1898, tiene lugar el atentado de falsa bandera que provocó el hundimiento del Maine en la Bahía de La Habana, que fue la excusa para que Washington entrara en guerra con España. “La independencia que sucede a estos hechos va en el sentido que hablaba Jefferson”, ya que “con el Tratado de París se establece un protectorado en Cuba, adjudicándose EE.UU. la construcción de una base naval en Guantánamo, territorio que aún usurpa”, puntualiza Galiotti y destaca que “todo ese plan de anexión y expansión chocó posteriormente con la Revolución Cubana”.
En La Habana, en Caracas y en toda América Latina siempre es 26
Al haberse cumplido recientemente 72 años del Asalto al Moncada Galiotti también recuerda que para los cubanos el 26 de julio es el Día de la Rebeldía Nacional, ya que “el Moncada es un ejemplo de esa definición, porque fue protagonizado por jóvenes, entre ellos el joven abogado Fidel Castro que había sido candidato a diputado por el Partido Ortodoxo antes de que tuviera lugar el golpe de Estado de Fulgencio Batista, un personaje comparable con Milei por su vocación de servicio hacia EE.UU.”.
Pero remarca que aquella gesta “deja en claro que la acción revolucionaria tiene que ver con interpretar que con los mismos métodos que se venían buscando para resolver los problemas del pueblo, no se iban a encontrar soluciones diferentes a las que ya habían fracasado”, por lo tanto “deciden una acción distinta que es la rebeldía encauzada a la liberación, a la independencia, la soberanía y la construcción de un mundo diferente. Es decir, a la distribución de la riqueza y a luchar contra la explotación y los explotadores. Ese es el concepto fundamental de la revolución que Fidel mismo plantea en su alegato conocido como “La historia me Absolverá”, que es el programa de la revolución y el manifiesto comunista latinoamericano y que tiene en esencia la continuidad de la lucha histórica, porque dice que el autor intelectual del Asalto al Moncada es José Martí”.
En la misma línea, reflexiona que Lamelas “encuentra en Argentina a un gobierno encabezado por Milei en alianza con el radicalismo, el PRO y algunos sectores del justicialismo que tienen afinidad con la idea de la anexión”, tal como lo corrobora “cuando se le da una base cerca de Ushuaia a EE.UU. para que pueda tener control sobre el Atlántico Sur, el cruce bioceánico y la Antártida Argentina”, algo que “se alinea absolutamente con la geopolítica estadounidense que va en tándem con la de Israel y el Reino Unido”.
En su viaje a la República Bolivariana de Venezuela Galiotti también participó el último domingo como observador internacional de las elecciones municipales en las que el chavismo se impuso con un 85 por ciento y en donde, como sostuvo Champa, se evidencia con claridad un proceso sostenido de “construcción de poder popular”.