Es la que hizo pública la Federación Sindical Mundial ante la decisión de la Presidencia Milei de eliminar las protecciones arancelarias para el sector, algo que “forma parte de la estrategia del capital para fortalecer los monopolios y empobrecer a los trabajadores”.
La Federación Sindical Mundial (FSM) hizo pública su solidaridad con los trabajadores de la industria del cuero de Argentina y con la Federación Argentina de Trabajadores de la Industria del Cuero y Afines (Fatica) “que luchan contra las políticas antiobreras del gobierno” que encabeza Javier Milei.
Al respecto, la FSM hizo hincapié en que “la eliminación de las protecciones arancelarias y la destrucción de la industria nacional forman parte de la estrategia del capital para fortalecer los monopolios y empobrecer a los trabajadores”, tras lo que aclaró que “esta es precisamente la estrategia que sigue fielmente el gobierno antiobrero y antipopular de Milei”.
Y, en este sentido, la FSM fue contundente a la hora de señalar que une su voz “a la de los trabajadores del país, quienes exigen la revocación inmediata del Decreto 38/25, que elimina las protecciones arancelarias sobre los cueros, y la protección de la industria nacional y los puestos de trabajo”, por lo que sin dudarlo destacó que apoya esta “justa lucha por la defensa del empleo, la producción y los derechos de la clase obrera”, ya que “su lucha es también nuestra lucha”.
Cabe citar que sobre fines de enero, Fatica se pronunció sobre la eliminación a las retenciones a la exportación de cuero que dispuso el ministro Federico Sturzenegger y que representa un verdadero golpe contra el conjunto de la industria curtidora. Con el dictado del Decreto 38/25, el gobierno nacional fijó la alícuota de los derechos de exportación de cueros vacunos en cero, conjuntamente con la reducción temporaria de las retenciones para los diversos cultivos agrícolas, una medida que suprime las protecciones arancelarias que rigieron por más de medio siglo lo que permitió el desarrollo de un polo industrial asentado sobre todo en el conurbano bonaerense que representa trabajo y valor agregado.
Con este telón de fondo, Fatica denunció que la Presidencia Milei es enemiga del desarrollo industrial y el trabajo argentino y que busca “reprimarizar la industria para lograr una fabulosa transferencia de recursos a los sectores más concentrados, desde los trabajadores e industriales argentinos”. Por lo que no duda al puntualizar que medidas como la adoptada por medio del Decreto 38/25 “atacan no sólo a los trabajadores curtidores, sino que impactan sobre toda la cadena de valor del cuero” y entonces afectarán “seriamente a los sectores de marroquinería, artículos de viaje, talabartería, guantes industriales, calzado y los derivados de todos sus proveedores”.