“Debemos contribuir a construir una alternativa para que no vuelva a suceder lo que pasó después de 2001, cuando no alcanzó para mover la matriz distributiva, para hacer un cambio de fondo hacia un modelo diferente que salga del capitalismo”, reflexionó Bárbara Palumbo en el contexto del 24 de marzo.
Como en el resto del país, en el Valle de Río Negro, la jornada del Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia estuvo atravesada por un espíritu unitario y consignas claras que trazan un sentido que articula los motivos que tuvieron quienes perpetraron el golpe de Estado de 1976 con los que, desde posturas fascistas, imponen hoy políticas de miseria planificada.
“Estuvimos presentes en las actividades de Fiske Roca, Bariloche y Cipolletti, también en Neuquén capital que es la marcha más grande del Alto Valle a la que se suele ir desde las localidades aledañas porque es una movilización muy masiva que esta vez se extendió por más de catorce cuadras”, puntualizó la secretaria Política del Partido Comunista de Río Negro, Bárbara Palumbo, quien destacó que en todos los casos fue contundente el repudio a Javier Milei y al esquema político que representa.
“Las consignas reclamaron que termine este gobierno”, destacó y añadió que también se hizo hincapié en el vínculo que el proyecto que ahora encabeza Milei, tiene con la dictadura que comenzó el 24 de marzo de 1976, “por el tipo de políticas que lleva adelante y por el clima que genera que está atravesado por la represión como la que vemos especialmente contra los jubilados”.
Pero también “por toda la política de ajuste, de persecución a las disidencias, la destrucción de las políticas de género y la negación de los delitos de lesa humanidad”. Y remarcó que “queremos que se vayan Milei y Villarruel, porque la vicepresidenta sabemos que es sumamente peligrosa por sus vínculos con militares genocidas, que lleva en su discurso la Teoría de los Dos Demonios y pretende retrotraernos a ese discurso negacionista y apologista de la dictadura en el que se justifican la desapariciones forzadas de personas”.
Después añadió que en 1976 “todo fue digitado por el Imperio para imponer un modelo económico de saqueo que tiene claras similitudes con la actualidad en el programa que lleva adelante Javier Milei, en medio de una creciente ingerencia de EE.UU. e Israel en nuestro país respecto a nuestros bienes naturales comunes, avances sobre nuestra soberanía y la extranjerización de la tierra siempre en detrimento del pueblo trabajador”.
Y denunció que el DNU que autoriza a que Milei vuelva a endeudar a los argentinos con el FMI “es una nueva vuelta de rosca del saqueo y la estafa que vamos a tener que pagar los trabajadores que somos los que sostenemos al país, porque sabemos muy bien que la inflación que intentan ocultar se ve en los bolsillos de las familias y las heladeras vacías y la falta de trabajo, los despidos y los salarios que van a la baja respecto a la canasta básica”.
¿Pero cómo se puede transformar en volumen político el reclamo que una vez más expresó el pueblo que, masivamente, salió a las calles con las banderas de Memoria, Verdad y Justicia? “Debemos contribuir a construir una alternativa, porque si no corremos el riesgo que vuelva a suceder lo que pasó después de 2001, cuando no alcanzó para mover la matriz distributiva, para hacer un cambio de fondo hacia un modelo diferente que salga del capitalismo”, reflexionó Bárbara y alertó que “de nada sirve poder salir de esta barbarie con un capitalismo que desde sectores progresistas llaman humano, pero que sabemos que resulta pan para hoy y hambre para mañana”.
Por eso es que resulta preciso “alcanzar mayores niveles de unidad y de organización y para lograrlo hay que hacer grandes esfuerzos hacia el interior de las organizaciones y también hacia el exterior para lograr más organización y unidad en las calles”.