Alrededor de trescientas personas se dieron cita el sábado para plantear ideas y debatir, convocados por organismos de Derechos Humanos, “junto a organizaciones y sectores que están en lucha, para enfrentar al fascismo y ser capaces de construir algunos lineamientos generales de propuestas propias”, destacó desde la Liga, Malena Silveyra.
La Liga Argentina por los Derechos Humanos (Ladh) fue una de las organizaciones convocantes al encuentro realizado el sábado pasado, en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires, en el que integrantes de diferentes fuerzas sociales, políticas, sindicales y de Derechos Humanos sumaron sus voluntades en la tarea de construir una multisectorial que salga al cruce de las políticas que lleva adelante la Presidencia Milei.
Fue una jornada intensa en la que alrededor de trescientas personas entre quienes estaban trabajadores recientemente despedidos de los Sitios de la Memoria, se dieron cita para plantear ideas y debatir, al tiempo que coincidieron en hacer un llamado a la construcción de unidad antifascista, bajo las banderas históricas de los organismos de Derechos Humanos y los 30 mil detenidos desaparecidos. Ahí estuvo presente el Partido Comunista, también los periodistas Luis Bruschtein y Néstor Piccone, lo diputados Mario Manrique y Paula Penacca, así como el filósofo Rocco Carbone, la socióloga Paula Klachko y la fundadora de la Fundadora de la Cátedra de Ingeniería Comunitaria de la UBA, María Eva Koutsovitis, entre otros.
“La idea del encuentro fue conversar y ponernos de acuerdo sobre el diagnostico de lo que sucede en nuestro país”, sostuvo desde la Ladh Malena Silveyra y explicó que se trata de una tarea necesaria, ya que “aparecen elementos que son los que siempre presenta el neoliberalismo en sus distintas fases, pero se suman otros novedosos que tienen que ver con la irrupción del neofascismo y su llegada al gobierno nacional”.
Pero también fue clara al puntualizar que, además, el encuentro tuvo que ver con “la tarea de avanzar en líneas de acción concretas, en proyectos propositivos que hablen a grandes trazos del proyecto que queremos” y aclaró que en este caso la centralidad no está puesta en el tema electoral, sino en “construir un espacio de articulación y unidad de los que luchan, de quienes nos encontramos en las calles resistiendo a la represión”.
Así las cosas, Malena Silveyra recordó que la Liga es parte de la Mesa de Organismos de Derechos Humanos conformada en 2015 como respuesta a la asunción del gobierno encabezado por Mauricio Macri y que “a partir de la situación planteada por el crecimiento del neofascismo en Argentina”, profundiza la búsqueda de iniciativas “que permitan articular con otros sectores que se encuentran golpeados por la política económica y represiva del gobierno que resisten en esta coyuntura particular por medio de diferentes luchas sectoriales”.
Y en ese sentido, hizo hincapié en que “nos pareció que había que dar un salto de calidad”, por lo que “teníamos que poder conformar un espacio con todas las organizaciones y sectores que están en lucha, que nos permitiera enfrentar al fascismo pero también ser capaces de construir algunos lineamientos generales de propuestas propias”.
Así fue que el 4 de febrero esta articulación llevó a cabo su reunión inaugural en la sede de Madres de Plaza de Mayo LF, ocasión en la que “nos dimos cuenta de que hay una voluntad y necesidad de generar este espacio que es transversal a todo el movimiento popular con la participación de diferentes corrientes de la izquierda, el peronismo y otras vertientes”.
Con este telón de fondo y después del enriquecedor saldo que dejó la cita del sábado pasado, se espera que otras similares comiencen a tener lugar en diferentes puntos del país. “Sería deseable que eso suceda”, recalcó la referente de la Ladh y aunque reconoció que “no tenemos las condiciones estructurales para pensar un encuentro nacional presencial, sin duda esta es una lucha que atraviesa a todo el país”, por lo que “si no la damos de manera federal, difícilmente vamos a poder conseguir enfrentar al fascismo”.
Y añadió que “en esa clave estuvimos conversando con las diferentes organizaciones con las que trabajamos a nivel nacional y las redes que se fueron construyendo de organizaciones de Derechos Humanos, intentando amplificar esto que seguramente va a tener características y dinámicas particulares en cada uno de los lugares en función de las situaciones locales”.