Fue ante la Secretaría de Turismo, Ambiente y Deportes de la Nación, para protestar contra la supresión de los cupos que históricamente se reservaba para las organizaciones sociales en complejos turísticos dependientes del Estado Nacional.
El Movimiento Territorial Liberación (MTL) fue de la partida en una singular protesta que tuvo lugar frente a la Secretaría de Turismo, Ambiente y Deportes de la Nación, en pleno centro porteño, hasta donde integrantes de diferentes organizaciones sociales llegaron para demandar contra la supresión de los cupos que históricamente se reservaba para las organizaciones sociales en complejos turísticos dependientes del Estado Nacional.
Cabe mencionar que por medio del mecanismo previsto por el turismo social, miles de personas pudieron acceder a un derecho tan elemental como el de disfrutar de vacaciones en complejos estatales como los de Chapadmalal y Embalse, que la Presidencia Milei pretende privatizar en lo que representa otro acto de enajenación de patrimonio que es del pueblo argentino.
Por eso es que se llevó a cabo un Piletazo en el que participó el MTL junto al Frente Barrial de la CTA de los Trabajadores, la Federación Nacional Territorial de la CTA Autónoma y la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular.
En ese contexto, ante la sede de la Secretaría de Turismo, sobre la vereda y a pocos metros de la intersección de Santa Fe y Suipacha, se desplegaron sobre una tela celeste, baldecitos y palas de plástico, sombrillas y reposeras, para representar de qué va este derecho del que Javier Milei quiere privar a miles de trabajadores.
También participaron integrantes de la Junta interna de ATE, del Movimiento de Trabajadores Excluidos, de La Germán, de ATE Capital, trabajadores de la Secretaría de Discapacidad, de la Coordinadora de Trabajadores Desocupados Aníbal Verón, de La Colifata, del Movimiento Mayo, La Social y Patria Grande, entre otros.
Con este telón de fondo, tras recordar que varias veces intentaron reunirse con el secretario, Daniel Scioli, pero no fueron recibidos ni obtuvieron respuesta a su solicitud, una delegación integrada por Gustavo Muñoz y Juan Vitta, Paciano Ocampo entró al edificio para plantear el reclamo al subsecretario de gestión administrativa de Turismo, Ambiente y Deportes, Diego Martín Fernández Oliver.
En la ocasión se le presentó un petitorio donde se alerta acerca de la intención del actual gobierno de «destruir la política de turismo social que tiene más de setenta años en el país» y que se implementa básicamente por medio de las unidades turísticas de Embalse y Chapadmalal. «A estas fechas, los años anteriores, decenas de organizaciones populares y miles de familias, estaban organizando sus vacaciones para, por primera vez en muchos casos, conocer el mar o la sierra, en los distintos gobiernos anteriores de Cristina Fernández, Mauricio Macri o Alberto Fernández», recuerda.
Y al respecto, después de hacer hincapié en que estas familias y las organizaciones «siempre pagaron su estadía y comida y además contrataron el transporte solventándolo en un cien por cien de forma autogestionaria», denuncia «el desmantelamiento de los complejos, la reducción del personal, la quita del derecho al ocio y esparcimiento a miles de familias y por tanto a muchísimos niños y niñas de todo el país y la preparación de un mega negocio inmobiliario en las hectáreas de ambas unidades turísticas».
Pero también lamenta que los principales perjudicados son los pibes «que llegaban a Chapadmalal y Embalse en sus viajes de estudio de fin de año, con los Torneos Juveniles Evita o a través del turismo familiar» y añade que el gobierno «pretende quitar derechos alimentarios, de salud, de educación y también de esparcimiento», algo que «no permitiremos porque seguimos creyendo que la justicia social es el camino de un país que merezca ser vivido por todo el pueblo y, no sólo, por las veinte familias más poderosas».