Esta es la advertencia que hizo desde las Juventudes Revolucionarias de Panamá, Evelyn Jaén, que al dialogar con Nuestra Propuesta advirtió que “es bastante difícil la situación que se está dando, no sabemos qué va a pasar exactamente durante los próximos días” y sostuvo que “se siente una tensión bastante grande”.
Hace una semana, en Ciudad de Panamá, alrededor de medio centenar de personas fueron arrestadas cuando protestaban para rechazar el proyecto de reforma al sistema de Seguridad Social que impulsa el gobierno, en un contexto en el que crece la tensión social, mientras que el presidente José Mulino consolida su sumisión a EE.UU., algo que quedó consolidado con la reciente presencia del secretario de Estado, Marcos Rubio, en tierras panameñas.
Cabe recordar que en lo que fue su primera salida al exterior como secretario de Estado, Rubio dejó en claro a Mulino que más allá de los globos de ensayo que lance con la exigencia de exención de tarifas para barcos estadounidenses o la toma de control del Canal, lo que le importa a Donald Trump es que Panamá se aparte de la iniciativa de la Ruta de la Seda diseñada por la República Popular China (RPCh).
También vale citar que poco antes de volver a la Casa Blanca, Trump amenazó con que EE.UU. se proponía retomar el control del Canal de Panamá, mientras que durante una reciente visita a Uruguay, el enviado especial de Washington para América Latina, Mauricio Claver-Carone, dijo que su país podría garantizar el mantenimiento del Canal con la condición de que Panamá no le cobre tarifas a las naves que lleven la bandera de las barras y estrellas.
Pero tras la visita de Rubio quedó en claro que la suspensión de tarifas era una carta de negociación para obtener lo que realmente le importa a Washington que es que Panamá abandone la Ruta de la Seda, iniciativa que durante 2017 lo contó como el primer país de la región en adherir. Tras cartón Mulino confirmó que su gobierno no renovará el memorándum de entendimiento que, por La Ruta de la Seda, firmó durante noviembre de 2017 con la RPCh.
Con este telón de fondo, resulta prudente hacer hincapié en que pese a que Beijín no posee inversiones demasiado importantes en territorio panameño, el acto de sumisión perruna expresado por Mulino, representa una victoria para Trump y su estrategia de recuperar posiciones en lo que Washington considera su patio trasero.
“Desde que escuchamos las declaraciones de Trump, hemos hecho varias manifestaciones entre sindicatos y organizaciones del país que van en simultáneo con otras que venimos llevando a cabo por el tema de la reformas a la Caja de Seguridad Social”, sostuvo en diálogo con Nuestra Propuesta, la militante de las Juventudes Revolucionarias de Panamá (JRP), Evelyn Jaén, quien también denunció que mientras la atención está puesta en las declaraciones del presidente estadounidense “se avanzó en la aprobación de las reformas…es como que se está aprovechando todo esto para jugárnosla por otro lado”.
En medio de este panorama, las JRP tienen un papel protagónico en las diferentes manifestaciones y vigilias que se vienen desarrollando para enfrentar ambas situaciones. “Durante la visita de Rubio nos manifestamos en la Universidad, como es costumbre volanteamos, pero fuimos reprimidos por la policía que simultaneo entró a la Universidad para seguir reprimiendo con gas lacrimógeno, violando la autonomía universitaria y sitiando el edificio durante una noche”, tras lo que hubo varios allanamientos de las viviendas de estudiantes que militan en las JRP.
Algunos de ellos fueron detenidos, como el dirigente social y referente de las Juventudes, Omar Concepción. “En la audiencia preliminar que se hizo a los detenidos se les imputan algunos delitos por los que se les podrían imponer penas de hasta siete años de prisión ‘por daños a la integridad de un agente de la autoridad’, cuando la realidad señala que quienes agredieron fueron los policías”, denunció Evelyn Jaen y fue clara al resaltar que se asiste a “una persecución a estudiantes que estamos ejerciendo libremente la protesta y el derecho a la libre expresión”.
En este contexto y en pocas semanas, el presidente Mulino pasó de aseverar que iba a defender “cada metro cuadrado del Canal de Panamá y sus zonas adyacentes”, a recular en chancletas ante la presencia de Rubio. “Hay que entender que entre nuestra ciudadanía, de alguna forma, hay bastantes gringueros que no entienden el significado de nación y pertenencia, y por eso prefieren servir a EE.UU. que ha estado con su actitud injerencista en nuestro país desde antes de la construcción del Canal”, puntualiza la referente de las JRP y añade que “desde entonces hemos estado prácticamente gobernados por una oligarquía fuerte, por pocas familias, y después de la invasión de 1989 se establecen gobiernos que comienzan las privatizaciones neoliberales”.
Y, en idéntica dirección, hace hincapié en que “esos mismos sectores son los que administran el canal, los que reparten los empleos y también las prebendas”, por lo que “muchos panameños no sienten como propio al canal y entonces permea esa idea de que si está mal administrado, puede ser mejor que lo tengan los gringos”.
Por otra parte, Evelyn Jaén, enciende luces de alarma al describir el panorama que por estos momentos atraviesa Panamá. “Es bastante difícil toda la situación que se está dando, no sabemos qué va a pasar exactamente durante los próximos días” destaca y advierte que “se siente una tensión bastante grande”, pero como dato positivo indica que “ahora sí se está viendo a la izquierda que se está uniendo, incluso dentro de la Universidad para enfrentar a un gobierno vendepatria, bastante de derecha y servil a los Estados Unidos”. Y en este sentido celebra que “está siendo importante la alianza entre estudiantes y trabajadores, algo que no pasaba desde los años 80 en mi país donde están volviendo a surgir estos movimientos y da la impresión de que va a pasar algo…puede estallar algo dentro de Panamá si se sigue ignorando la voz del pueblo”.