En el marco del Día Internacional de la Salud, desde Cicop se advirtió sobre la situación de extrema gravedad que atraviesa el sistema público, universal y gratuito de salud a raíz de las agresiones que recibe de la Presidencia Milei. Protesta en Lomas de Zamora.
El martes pasado fue el Día Internacional de la Salud y transcurrió en momentos en que el sistema público, universal y gratuito de salud en Argentina está siendo seriamente agredido, ya que la Presidencia Milei “la ataca desfinanciándola y amenazando con el cierre de hospitales como el caso del Bonaparte y de áreas del Ministerio de la Salud”, tal como denuncio el integrante del Consejo Directivo de la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la Provincia de Buenos Aires (Cicop), Pablo Torres.
Y también alertó que el gobierno nacional pretende transferir hospitales hacia las provincias, “replicando la desgraciada transferencia que se hizo durante dictadura y que culminó con Menem”, a lo que se suma la desregulación de los precios de medicamentos y prepagas, “el incremento de la desocupación que provoca que muchas personas pierdan su obra social”, lo que “recae en el hospital público que está desfinanciado por el recorte de fondos a las provincias y de éstas a los municipios”.
Todo esto, advirtió Torres, configura “un coctel explosivo que tiene su ejemplo más siniestro en esto de sacarle los medicamentos oncológicos a los pacientes a los que hasta hace poco el Estado se los proporcionaba lo que plantea una situación muy dramática”.
Con este telón de fondo, “insistimos con que la salud es un derecho que debe ser garantizado por el Estado y desde el Foro por el Derecho a la Salud en Defensa del Sistema Sanitario Nacional nos proponemos articular todas las resistencias que hay a estas políticas del gobierno de Milei y a la vez ir precisando programas para el área para cuando tengamos condiciones para avanzar en una dirección diametralmente opuesta a la actual”, algo que “implicaría terminar con la fragmentación del sistema, recuperar el rol central del Estado en las políticas sanitarias y en la prestación de servicios”.
Esto, hizo hincapié el referente de Cicop, “implica revertir el desfinanciamiento crónico que afecta a nuestros sistema de salud”, pero asimismo “avanzar hacia una democratización del gobierno del sistema”, algo que pasa por “darle lugar a la participación de usuarios y trabajadores”.
En este contexto en Lomas de Zamora se hizo una actividad convocada por Cicop y la Asociación de Profesionales de la Salud de ese municipio en la que se demandaron condiciones de trabajo dignas, una equiparación salarial tal como lo prevé la Ley 10.471 que establece la Carrera Profesional Hospitalaria, además de pases a planta y recategorizaciones automáticas. Pero también exigió que cese la precarización laboral ya que “no hay salud pública con sus trabajadores precarizados”.
Al respecto, Torres puntualizó que “si bien se profundizaron con Milei, lamentablemente estos problemas que tiene el sistema de salud vienen desde antes”, ya que comienzan tras el golpe de Estado que derrocó a Juan Domingo Perón “cuando se intenta desmontar todo aquello que había puesto en pie Ramón Carrillo y desde entonces se produjo un creciente desarmado de sistema de salud que era modelo para América Latina y que tenía que ver con un rol central del Estado en la cuestiones sanitarias”.
Uno de esos problemas es la fragmentación, algo que afecta severamente al sistema en Lomas de Zamora. “En la provincia de Buenos Aires no tenemos un solo sistema de salud pública”, explicó y añadió que “podemos decir que tenemos 136, uno por cada municipio más el provincial y lamentablemente haciendo uso de la autonomía que les da la Constitución, muchas veces los municipios llevan adelante políticas que tienen poco que ver, incluso con las que está implementando el gobierno provincial que ha tomado algunas decisiones que van en la dirección correcta”.
Este es el caso de Lomas de Zamora “tenemos un modelo que apuesta a la complejidad porque de esa forma pretenden recuperar dinero de las obras sociales y prepagas, entonces montan tres establecimientos de alta complejidad, un hospital de diagnóstico inmediato, uno oftalmológico y otro odontológico que no nos oponemos a que existan, pero advertimos que estamos en un problema si eso se hace en detrimento de lo que es la obligación central del municipio que es sostener el nivel primario de atención”.
Y, en este sentido, Torres remarca que “ese nivel está muy castigado en Lomas desde hace varios años, las unidades sanitarias que ahora son llamadas centros de salud se vienen abajo, tiene obras paralizadas y falta de personal en todas las áreas porque los salarios que paga el municipio son inferiores a los de la provincia” y además la comuna adoptó “una política de precarización del empleo en el área de salud, lo que implica que todo nuevo ingreso sea por medio del monotributo, lo que es precarización laboral”, al tiempo que “desfinancia al instituto de Previsión Social de la provincia al Ioma”.
Pero fundamentalmente plantea la pérdida de estabilidad para los trabajadores, algo que atenta contra la posibilidad construir con profesionales que tengan anclaje y desarrollen su carrera profesional en el municipio, al tiempo que “dificulta el armado de equipos y la capacitación de la gente porque son aves de paso”.