Desde los gremios docentes salieron al cruce del intento de la Presidencia Milei de habilitar una 0800 para que se denuncie a docentes que “adoctrinan” a los alumnos. “Es una verdadera cacería de brujas”, advirtió desde La Violeta en Suteba de La Plata, César Zubelet.
“Nosotros educamos, no adoctrinamos”, recalcó desde La Violeta en Suteba de La Plata, César Zubelet, al repudiar la decisión La Rosada de enviar al Congreso un proyecto para que mediante una modificación de la Ley Nacional de Educación, se sancione lo que el gobierno nacional califica como “adoctrinamiento” dentro de las escuelas.
Por tal motivo, el vocero presidencial Manuel Adorni, anunció que se prevé abrir una línea telefónica para que se denuncien ese tipo de actividad, aunque no especificó en qué consistiría tal actividad. Pero lo que sí puntualizó es que la modificación de la normativa vigente, se espera concretar por medio de una iniciativa que se “llevará al Congreso en el texto de la Ley Bases 2 con modificaciones para los artículos 11 y 26 de la ley 26.206, que refieren a las garantías de los derechos a la educación de los niños en el aula”.
“Queda claro que lo que pretende desatar el gobierno de Milei es una verdadera cacería de brujas”, alertó Zubelet y añadió que lo que se persigue es “condicionar el proceso pedagógico y acorralar a los docentes que venimos demostrando que no estamos dispuestos a permitir que se desguace el sistema público, universal y gratuito de educación que tenemos en Argentina”.
Pero también, recalcó el docente de La Violeta que, con este tipo de anuncios, el gobierno “busca cambiar el foco de atención de la sociedad que es constantemente golpeada por el brutal ajuste que imponen las políticas gubernamentales”, al tiempo que “quieren distraernos de las luchas que venimos protagonizando para exigir que se convoque a la Paritaria Nacional Docente, para que se restituyan el Fondo Nacional de Incentivo Docente, el Fondo Compensador, los que fueron acordados para abastecer a los comedores escolares y los que se deben destinar a infraestructura escolar”.
Por su parte en idéntica dirección se pronunció Ctera, que salió al cruce del anuncio hecho por Adorni señalando su preocupación “por las medidas antidemocráticas desplegadas por el gobierno de Javier Milei”, al tiempo que denunció que se enmarca en el contexto de “represión, censura y persecución ideológica” que está llevando a cabo en contra de la docencia, que se suma a “las medidas de ajuste, desfinanciamiento educativo, precarización laboral y vulneración de derechos sociales ya ejecutadas por el gobierno nacional”.
Y tras recordar que esta idea de “exhortar a las familias a denunciar por ‘inculcación ideológica’ a través de un 0800”, ya fue planteada durante el gobierno que encabezó Mauricio Macri, advirtió que “hoy nos encontramos con una educación a la deriva, con un Ministerio de Educación degradado a Secretaría, sin un proyecto educativo integral, sin propuestas para mejorar la calidad educativa, donde solo encontramos medidas para destruir a la escuela pública”.
Pero, lamentó, “en esta situación, al gobierno sólo se le ocurren medidas represivas, que vulneran los derechos conquistados históricamente y lesionan la libertad de cátedra y de expresión que hemos tratado de cuidar y garantizar durante estos cuarenta años de democracia y que hoy vuelven a estar en peligro, como lo estuvieron en la larga noche de la dictadura cívico-militar”.
Y, además sostuvo que “creer que cuando un maestro o una maestra enseña está haciendo adoctrinamiento, es faltarle el respeto a esos docentes y a los estudiantes”, ya que “la idea de adoctrinamiento supone que quién está aprendiendo es un ‘cabeza hueca’, que recepciona pasivamente lo que la docente dice y, por lo tanto, que carece de pensamientos o ideas propias”.