Médicos del Mundo alerta de que la ayuda que recibe la población saharaui “no cubre ni siquiera lo esencial”, situación que es “violatoria del marco del Derecho Internacional que protege a las poblaciones civiles, especialmente a aquellas que están en situación de refugio”.
La organización Médicos del Mundo alertó el viernes pasado de que la ayuda humanitaria que recibe la población saharaui “no cubre ni siquiera lo esencial” de las necesidades que presenta y recalcó que el sistema sanitario destinado a su asistencia se encuentra en un momento crítico. Esta verdadera emergencia humanitaria se inscribe en el marco del cincuenta aniversario de la firma del Acuerdo Tripartito de Madrid y ante el intento de Marruecos de impulsar un amañado “plan de autonomía”, que desconoce de plano los derechos saharauis.
Al respecto, la organización Médicos del Mundo hizo hincapié en que dadas las actuales condiciones, la operación humanitaria no alcanza como para planificar mejoras ni ampliar servicios y “apenas puede sostener lo mínimo”. Añadió que, en medio de lo que describió como “un escenario alarmante”, el sistema sigue funcionando fundamentalmente “gracias al esfuerzo extraordinario del personal de salud saharaui”.
En alusión a la actitud que tiene el Reino de Marruecos, advirtió que resulta preciso que tengan en cuenta las necesidades humanitarias de la población saharaui refugiada “cuya cobertura no debe convertirse en instrumento de presión sobre una de las partes”, ya que eso es “violatorio del marco del Derecho Internacional que protege a las poblaciones civiles, especialmente a aquellas que están en situación de refugio”.
En este aspecto, denunció que hasta el momento ni la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) ni los gobiernos europeos o sus agencias de ayuda internacional estuvieron a la altura de sus obligaciones para con las necesidades de la población saharaui refugiada, que “tiene derecho a vivir con dignidad”, para lo cual el derecho humano a la salud “es una prioridad urgente”.
Cabe citar que durante los últimos años, los aportes internacionales destinados a este tipo de ayuda se redujeron en hasta un cuarenta por ciento, lo que impacta severamente en los presupuestos destinados a las operaciones humanitarias en los campamentos en Tinduf, Argelia, al tiempo que agrava el efecto de las carencias alimentarias y nutricionales del conjunto de este pueblo que lucha por su derecho soberano a la autodeterminación, ya que según un relevamiento realizado por Médicos del Mundo “el 64 por ciento de los saharahuis está en situación de inseguridad alimentaria”.