De Cuba a Guatemala y Panamá, desde Perú y Ecuador a Brasil y Uruguay, pero también en Paraguay, Colombia y EE.UU., el Día Internacional de los Trabajadores se conmemoró con marchas y actos.
La jornada del Día Internacional de los Trabajadores estuvo atravesada en nuestro continente, por movilizaciones y reclamos que exceden lo sectorial, para proyectarse a problemáticas nacionales e internacionales. En este sentido, las demandas contra el bloqueo que sufre Cuba y el repudio contra la masacre que el Estado de Israel perpetra contra el pueblo palestino son algunas de las constantes que se dieron en diferentes ciudades de la región.
Y, como no podía ser de otra manera, una de ellas fue La Habana, donde como en toda Cuba volvió a reverdecer el espíritu revolucionario en una jornada en la que alrededor de cuatro millones de trabajadores, ratificaron su respaldo al socialismo con multitudinarias concentraciones y desfiles.
En la capital del país, fueron cerca de trescientas mil las personas que se dieron cita en la Tribuna Antiimperialista para celebrar este 1° de Mayo, en un acto que estuvo presidido por Raúl Castro y el presidente Miguel Díaz-Canel, en el que el secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba, Ulises Guilarte de Nacimiento, dedicó la jornada “a la heroicidad del pueblo cubano, que concentra sus esfuerzos en la recuperación económica como la batalla fundamental”. Y tras fustigar a EE.UU. y el bloqueo que perpetra contra su país, remarcó que “Cuba y su pueblo no permanecemos indiferentes ante las graves violaciones que tienen como víctima al pueblo palestino”.
Quienes también condenaron el bloqueo estadounidense y la masacre contra el pueblo gazatí, son los trabajadores guatemaltecos. Precisamente fue en Ciudad de Guatemala y durante la marcha que los trabajadores de este país centroamericano protagonizaron ayer, en donde diversos sindicatos se unieron para movilizar hasta el Monumento al Trabajo y desde ahí hacia Plaza Central que está ubicada frente al Palacio Nacional de la Cultura, que es la sede del Gobierno Nacional, donde se demandó mejoras en las condiciones laborales.
Más al sur, en Brasil, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva se comprometió a avanzar en “más conquistas de derechos” para los trabajadores ya que, argumentó, “otra vez un metalúrgico va a arreglar el país”. Fue durante el acto celebrado en San Pablo, en el que participaron miles de personas y en donde Lula hizo un repaso de las políticas sociales que impulsó durante lo que va de su nuevo gobierno. Ahí estuvo presente el Partido Comunista do Brasil, que dio a conocer un documento en el que señala que en el Día Internacional de los Trabajadores, “la clase trabajadora levanta la bandera de la paz, las libertades y exige empleos y derechos”, tras lo que alerta que “la fase actual del capitalismo está profundizando cada vez más la precariedad del trabajo, reduciendo los salarios y eliminando derechos previamente conquistados” y añade que “para ello, debilita la democracia, patrocina guerras y promueve genocidio como el que está teniendo lugar contra el pueblo palestino en Gaza”.
Por su parte, en medio de un clima atravesado por la violencia institucional que impone el gobierno encabezado por Daniel Noboa, y que se ve acrecentado por la que llevan adelante las bandas delictivas que a caballo de la dolarización se enseñorean en el país, los trabajadores de Ecuador también salieron a las calles. En este contexto, el Partido Comunista del Ecuador, denunció que el pueblo de este país “es víctima de un sistema capitalista donde el imperialismo busca mantener su hegemonía mediante gobiernos títeres que abren las puertas al saqueo y a la explotación de las grandes transnacionales, sometiendo y reprimiendo a los pueblos”.
No menos mal andan las cosas por Perú, donde la clase capitalista que actúa en este país, gobierna por medio de un parlamento que le es funcional, tal como lo es la presidenta de facto Dina Boluarte. En Lima y en otras ciudades hubo actos y marchas en las que estuvo presente el Partido Comunista Peruano que, en este contexto, recordó las palabras de Lenin y recalcó que “no hay apoyo al gobierno ni al congreso golpista, asesino, incompetente y corrupto”, por lo que reclamó “todo el poder para el pueblo peruano”.
Aquí también se dijo ¡Presente!
Mientras tanto en Ciudad de Panamá, a cuatro días de elecciones generales en las que se va a determinar quién es el próximo presidente, hubo un fuerte llamamiento a la unidad de movimiento obrero durante las manifestaciones que se llevaron a cabo para celebrar el Día Internacional de los Trabajadores.
Los manifestantes partieron desde el emblemático Parque Belisario Porras hacia la Plaza 5 de Mayo, en las inmediaciones de la sede de la Asamblea Nacional, en la que también se dieron cita las fuerzas que protagonizaron las jornadas de protesta que entre octubre y noviembre de 2023, salieron a las calles y obligaron al ejecutivo a indicar un plan de cierre de Minera Panamá, filial de la trasnacional canadiense First Quantum.
Por su lado, en Colombia el Partido Comunista se hizo presente en las manifestaciones convocadas por los principales sindicatos en Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla y Cartagena, entre otras ciudades, en las que hubo un fuerte respaldo al presidente Gustavo Petro y se denunció que hay sectores de derecha que intentan dar un golpe de Estado.
Asimismo, en la Avenida Libertador de Montevideo, tuvo lugar el acto central convocado por el PIT-CNT, en el que su titular Marcelo Abdala, demandó que se lleven adelante cambios profundos en la matriz productiva del Uruguay, pero también en “su matriz de distribución de la riqueza y en la construcción de un camino largo de profundización de la democracia para la pública felicidad”.
“Orgulloso de formar parte de la reorganización independiente de la clase trabajadora y de la bellísima alianza obrero-estudiantil que se expresó hoy”, sostuvo el secretario general del Partido Comunista Paraguayo, Najeeb Amado, al celebrar la jornada que ayer se vivió en su país donde, en Asunción, la cita fue en Plaza Uruguaya donde se demandó libertad sindical, estabilidad laboral, por el derecho a la seguridad social y a las jubilaciones, así como condiciones laborales y salarios dignos, entre otras cosas.
Y en EE.UU. donde el 1° de mayo no es considerado oficialmente Día de los Trabajadores, el Partido Comunista plantó bandera y saludó “a todos nuestros partidos hermanos de un mundo” que, recalcó, “mira horrorizado mientras el gobierno israelí continúa su guerra genocida en Gaza, recibiendo financiación y apoyo de EE.UU. y sus aliados, en tanto la Otan sigue amenazando con ampliar la guerra en Ucrania, el imperio estadounidense continúa intentando estrangular al pueblo cubano y los belicistas en Washington DC hablan abiertamente de militarizar aún más el Pacífico”.