“Les decimos a Massa y a Grabois que estamos para militar y aportar, porque estos viejos y viejas somos los que más sabemos de las necesidades de nuestra clase y de nuestro sector”, recalcó Sandra Zapatero, durante el acto convocado por diferentes organizaciones ante la Pirámide de Mayo.
La defensa de los derechos de los trabajadores jubilados y pensionados, pero también el reclamo de un “urgente aumento de jubilaciones y pensiones” para que “ninguno quede debajo de la línea de pobreza”, son las principales demandas que durante la tarde de ayer miércoles, volvió a llevar a Plaza de Mayo un grupo de organizaciones entre las que está el Movimiento de Jubilados Liberación de la Corriente Nacional Agustín Tosco (MJL).
“Es el comienzo de una larga lucha”, señalaba hace dos meses el responsable nacional del MJL, Juan Carlos Serra, después de participar en la jornada de movilización hacia Plaza de Mayo que, tal como lo anticipó entonces, era el puntapié inicial de otras que se iban a reiterar cada tercer miércoles de mes hacia el mismo escenario.
Esa vez Serra también había sostenido que era importante que “las dos CTA se unan y pongan en marcha una medida de fuerza para defensa de los jubilados y nuestros planteos”. Y ayer se avanzó en ese sentido, ya que esas centrales dieron presente, tal como lo hizo la Confederación General de Jubilados, Retirados, Pensionados y Adultos Mayores del País (CGJ), el Centro de Jubilados y Pensionados Grito de Libertad, el Movimiento de Jubilados y Pensionados y el Movimiento Migrante Paraguayo en Argentina.
Con este telón de fondo, ante la Pirámide de Mayo, la secretaria de Seguridad Social de la CTA de los Trabajadores, Sandra Zapatero, recordó que el 19 de julio es la fecha en que nació Juan José Castelli, pero también aquella en que asesinaron a Mario Roberto Santucho tres años antes de que triunfara la Revolución Sandinista. “Estamos como estamos porque no terminamos con el neoliberalismo como los nicaragüenses, porque no revolucionamos como Castelli y como Santucho”, advirtió y fue clara al indicar que “nos duele mucho Jujuy”, donde a instancias de Gerardo Morales “se está reprimiendo, secuestrando y torturando como en las épocas más oscuras”.
De ahí que sin dudarlo, hizo hincapié en que es preciso “redoblar los esfuerzos para que esos tipos no vuelvan al gobierno”, por lo que “les decimos a Massa y a Grabois que acá estamos para militar y para aportar, porque estos viejos y estas viejas somos los que más sabemos de las necesidades de nuestra clase y de nuestro sector”. Y, en este sentido, resaltó que hoy jueves “vamos a marchar hacia las oficinas del Grupo Ledesma, en defensa del pueblo jujeño”, durante la jornada de movilización convocada para exigir que cese la violencia institucional desatada en Jujuy, en coincidencia con el 47 aniversario de la Noche del Apagón.
También se dirigió a los presentes el presidente de la CGJ, Carlos Valle, quien de cara a las elecciones presidenciales de este año, dijo que “estamos frente a una disyuntiva, vamos a tener que votar al menos malo” y añadió que el FMI y el Departamento de Estado de EE.UU. “ya habían elegido, hace dos o tres años, a los tres candidatos principales”. Y, al respecto, un dudó a la hora de advertir que “está en peligro el futuro de la República, de la Patria, y por ende se corre el riesgo de perder el sistema jubilatorio”, tras lo que lamentó que “vaciaron el Fondo de Garantías de Sustentabilidad”.
Por lo que instó a “militar como nunca y de agregar gente como nunca, porque cuando esperemos gane nuestro candidato, no vamos a estar en resistencia sino para exigirle que cumpla la palabra, que se eche al FMI y que de una vez por todas la República recupere su democracia” ya que “democracia es ni más ni menos que la voluntad del pueblo, el mandato popular y lamentablemente muy pocas veces se cumple”.
Asimismo, después de remarcar que “tenemos una lucha muy intensa porque estamos ganando efectivamente alrededor del veinticinco por ciento de lo que ganábamos hace ocho años”, destacó que “el poder adquisitivo en nuestros haberes es lo que marca la verdadera situación de la economía y de la economía familiar de mujeres y hombres que apenas pueden comprar mercadería para comer, que ya no pueden hacer viajes de turismo ni comprarse un celular, todo lo que la derecha dijo que no merecíamos, pero que don cosas que debemos recuperar”. Y por eso, concluyó, “vamos a hacer exigir que se respete definitivamente a todos lo que hemos dado la vida para llegar hasta acá”.