El jubilado Gerardo Mirkin se descompensó, estuvo cuarenta minutos tendido y los uniformados impidieron que se lo asista. “Son épocas de solidaridad y de acciones colectivas”, destacó el MJL y reafirmó su compromiso en la tarea de construir “la unidad más amplia para terminar con tanta injusticia de este gobierno neoliberal”.
El Movimiento Jubilados Liberación (MJL) hizo público su repudio al nuevo acto de represión que fue perpetrado por personal policial contra trabajadores jubilados que el miércoles pasado se manifestaban ante la sede del Pami en un acto que, esta vez, pudo acabar en una tragedia mayor ya que la agresión provocó un cuadro de descompensación de Gerardo Mirkin, lo que puso en peligro su vida, por lo que debió ser hospitalizado.
Al respecto, el MJL rechazó “la terrible represión de la policía del gobierno antipopular de Milei, Bullrich y Macri, ejercida sobre los jubilados que cada miércoles se manifiestan en el Congreso de la Nación en contra las políticas que ajuste a los sectores más vulnerables de la sociedad” que, en este caso puntual, “pusieron en peligro la vida del compañero jubilado Gerardo Mirkin, a quien tuvieron casi una hora tirado en el suelo, convulsionando, sin permitir que ninguno lo asistiera”.
Pero también hace hincapié en que, durante la misma jornada, hubo varias personas heridas y detenidas. Por lo que con este telón de fondo y tras recalcar que “hoy más que nunca son épocas de solidaridad y de acciones colectivas”, el MJL reafirmó su compromiso en la tarea de construir “la unidad más amplia posible de todos los que luchan, para terminar con tanta injusticia de este gobierno neoliberal”.
Mirkin estaba afuera de la sede del Pami manifestando en reclamo de que la obra social de los jubilados y pensionados, restituya el cien por cien de la gratuidad en los medicamentos que retiró de su vademécum, cuando a raíz de la feroz represión desatada por la Policía de la Ciudad, quedó inconsciente tirado en plena calle y así tuvo que permanecer durante alrededor de cuarenta minutos, antes de que llegara una ambulancia del Same para trasladarlo al Hospital Argerich. En todo momento los uniformados impidieron que sus compañeros se acercaran a Mirkin para asistirlo, lo que provocó forcejeos que como resultado dejaron otro trabajador detenido.
Lo que pasó con Mirkin lejos está de constituir un hecho aislado. La escalada de las fuerzas policiales estatales y paraestatales que comanda Patricia Bullrich, se presenta cada vez más agresiva y se objetiva en los sectores que presentan mayor vulnerabilidad a las políticas que impone la Presidencia Milei. Hace menos de un mes un reconocido militante del esquema mileísta, atacó a patadas a un jubilado que reclamaba contra el ajuste y tras el hecho, lejos de detenerlo, personal policial lo escoltó fuera de la marcha y lo dejó en libertad.
Y todavía están frescas las imágenes que dejó la represión policial llevada a cabo a principios de septiembre ante la sede del Palacio Legislativo, en la que integrantes del dispositivo de fuerzas federales comandadas por Patricia Bullrich, atacaron con palos y gas lacrimógeno a jubilados que ahí se manifestaban, entre ellos a la militante comunista Miriam Sonatti, quien en esa ocasión fue clara al señalar que “si alguien dudaba, con esta represión ya le debe quedar claro que Milei y su gobierno son de tinte fascista, nada tiene de democrático”.