Así lo recalcó el coordinador del MTL bonaerense, Mario Micheli, al demandar que los senadores voten contra el Proyecto de Ley Bases 2 y convocó a movilizar el miércoles hacia el Congreso Nacional.
“No hay nada en el medio, no hay posibilidad de medias tintas”, advirtió el coordinador del MTL de la provincia de Buenos Aires, Mario Micheli, al emplazar a los senadores que durante la sesión convocada para el miércoles que viene, van a tener que decidir el destino del Proyecto de Ley Bases 2 que ya tiene media sanción de la Cámara Baja. Y lo harán en un contexto en el que la CGT junto a las dos CTA y la Unión de Trabajadores de la Economía Popular, van a llevar a cabo una movilización hacia el Congreso Nacional, para exigir que voten negativamente esa herramienta que es clave para la Presidencia Milei.
“Ya estamos trabajando para eso, hemos estado toda la semana pasada juntando firmas contra la Ley Bases 2 y esperamos que la del miércoles sea una gran movilización”, sostuvo Micheli tras lo que hizo hincapié en que “hoy, más que nunca, los que tienen que dar la cara y ponerse en un lugar de defensa del pueblo son los senadores”.
La convocatoria a movilizar pasado mañana, fue hecha el viernes pasado durante una conferencia de prensa que encabezaron Pablo Moyano, Hugo Yasky, Ricardo Pignanelli, Sergio Palazzo, Gabriel Katopodis y Taty Almeida en la que el líder del sindicato de Camioneros puntualizó que los senadores “tienen una oportunidad histórica: se convierten en héroes o en traidores”, pero también expresó su deseo de que los miembros de la Cámara Alta y los gobernadores a quienes los unen vasos comunicantes, “privilegien el bien común de toda la Argentina y no una obra pública más o unos mangos que pueda prometer el Gobierno, porque los va a terminar cagando igual”. Y sin dudarlo resaltó que “es una necesidad y una obligación estar el día miércoles rechazando esta Ley Bases que destruye a las industrias, va a destruir a los transportes y a hacer que los trabajadores vuelvan nuevamente a pagar el Impuesto a las Ganancias”.
La agresión para el universo del trabajo que plantea el Proyecto de Ley Bases 2 y el capítulo fiscal es clara, ya que si prospera, entre otras cosas va a imponer:
* La creación la figura de monotributista con hasta cinco “colaboradores” a los que se priva de los derechos que garantiza tener relación de dependencia.
* La criminalización del derecho a huelga.
* La eliminación de sanciones a quienes que contraten en negro o retengan contribuciones patronales.
* La supresión de la responsabilidad solidaria por terciarizar trabajadores.
* La posibilidad de que se pase a disponibilidad de trabajadores estatales por hasta doce meses, para después despedirlos.
* El aumento del período de prueba hasta un año.
* La condonación de deudas y el reconocimiento de hasta sesenta meses de aportes a empleadores que no registren trabajadores.
* La redistribución regresiva de la carga tributaria. Vuelve a instalar la cuarta categoría del Impuesos a las Ganancias, al tiempo que reduce la carga tributaria en el caso de
Bienes Personales que es el impuesto que grava a la riqueza más concentrada.
* Y va a acabar con la moratoria previsional.
Así las cosas, queda en evidencia que tal como el DNU 70/2023, la iniciativa sobre la que ahora les toca a los senadores expedirse está diseñada para reformular el vínculo que desde hace casi un siglo, rige a las relaciones entre los universos del trabajo y el capital, pero no sólo eso. “Amo ser el topo dentro del Estado, yo soy el que destruye el Estado desde adentro”, aseveró la semana pasada Javier Milei, al ser reporteado por el sitio de noticias estadounidense The Free Press.
“A confesión de parte, relevo de pruebas”, sostuvo Micheli al referirse a la frase de Milei y añadió que “es difícil aceptar que el Presidente, que es la máxima autoridad del Estado, asuma que quiere destruir el Estado” y en este sentido reflexionó que “esto, incluso, abre la posibilidad de que se le inicie un proceso de juicio político a Milei”.
Y, al respecto, el dirigente del MTL insistió con que el Proyecto Bases 2 y el DNU, “son las principales herramientas para ese cometido que públicamente enunció Milei”, por lo que “no podemos quedarnos con que sólo se trata de un proyecto más o con que el presidente está loco o algo por el estilo”, ya que “acá se está jugando el futuro de la Patria y su soberanía, por eso nuestros representantes en el Legislativo deben poner las cosas en su lugar y dejar de estar negociando puestitos, cargos o lugares a costa del sufrimiento del pueblo en general, pero además a costa de la destrucción del propio Estado que supuestamente el presidente representa”.
Por lo que fue claro cuando remarcó que en la sesión convocada para el miércoles, “no hay posibilidad de posturas timoratas”, ya que “hay un presidente al que sólo le importa satisfacer a esos empresarios que lo aplauden de pie, por eso trabaja para los monopolios y para el sector privado más concentrado” y como “no cabe ningún atisbo de negociación ni de espera, precisamos respuestas rápidas y, en ese marco, sin duda es que hoy más que nunca los senadores deben dar la cara”.