En defensa de los derechos de los jubilados y en vistas a organizar la lucha contra el ajuste de Milei, se reunió el Movimiento Jubilados de Liberación (MJL). “Es necesario reunir espacios y voluntades para derrotar al gobierno” dijo Juan Carlos Serra. Un plenario y una movilización a Plaza de Mayo son las próximas iniciativas a desarrollar.
En una reunión celebrada en el Comité Central del Partido Comunista, el Movimiento Jubilados de Liberación (MJL) resolvió ampliar y profundizar las luchas en contra del plan de ajuste del gobierno de Javier Milei, que tiene a los jubilados como uno de sus principales afectados. Tras el encuentro Juan Carlos Serra, referente del MJL, aseveró que “la unidad es un valor estratégico, por eso decidimos participar y promover la organización de un plenario general de agrupaciones de jubilados y pensionados”. El plenario se llevará a cabo el próximo 13 de abril en la sede porteña del Sutna y tiene como objetivo “discutir y acordar un plan de lucha y un programa mínimo que defienda a los jubilados y que a su vez pueda acoplarse a las iniciativas de resistencia a las políticas de la derecha en el país”, explicó.
En efecto, este plenario forma parte de una serie de iniciativas que los jubilados comunistas vienen organizando en vistas a organizar la conformación y el despliegue de una gran multisectorial, junto a una veintena de organizaciones. “Para poder enfrentar con fuerza al gobierno de Milei es necesario reunir espacios y voluntades” amplió Serra y puntualizó que “estamos abocados a la tarea de crear una masiva convocatoria que rechace las políticas de ajuste y que defienda las conquistas de todos los trabajadores”, entre ellos las de aquellos que trabajaron toda su vida y que ahora ven cómo el gobierno licúa sus ingresos y elimina políticas sociales de acceso a la salud, los medicamentos, el ocio y el esparcimiento, etc.
En esa oportunidad, los comunistas propondrán un programa mínimo de reivindicaciones en torno a propuestas concretas con la meta de aglutinar a las organizaciones que participarán de la iniciativa y, más ampliamente, a todos los jubilados y pensionados del país. Entre las propuestas, Serra detalló que “en primer lugar los jubilados y pensionados deben cobrar ya mismo un aumento de emergencia de al menos doscientos mil pesos a modo de recomposición por lo perdido estos meses de inflación y congelamiento salarial”.
También, “consideramos que la deuda es con el pueblo y no con el FMI, que apoya y promueve una reforma jubilatoria a tono con el ajuste del gobierno”. Anudado a esto último, “una prioridad del movimiento de jubilados debe ser la defensa del Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la Anses” como así también una reivindicación histórica: el 82 por ciento móvil.
Asimismo, el MJL resolvió promover y convocar a una movilización a Plaza de Mayo el próximo 23 de abril. Hasta el momento, la convocatoria es promovida por el Partido Comunista y el Partido Frente Grande. “Contamos también con el apoyo y la participación de la Corriente Nacional Agustín Tosco y esperamos que la iniciativa se amplíe bajo el principio de unidad para derrotar al gobierno y al ajuste”, detalló.
Más allá de las demandas puntuales, Serra explicó que “el éxito o el fracaso de la lucha de los jubilados está atado a la del movimiento obrero y el campo popular”. Por ello, “necesitamos que se convoque a un paro general con movilización en el marco de un plan de lucha coordinado desde un centro coordinador en el que además del movimiento obrero participe el movimiento social”. A sabiendas de que pese a la urgencia de la necesidades los tiempos políticos y sociales tienden a diferir, Serra hizo hincapié en “durante el mientras tanto no hay que darle ni un minuto de tregua al gobierno”.
En efecto, la suerte de los jubilados se define en la calle, pero también en el Congreso Nacional, en el que Diputados debe decidir si acepta o rechaza el DNU 70/2023 impugnado por el Senado. También, es el Congreso quien debería definir una nueva fórmula jubilatoria que anule la decretada por el gobierno nacional hace unas semanas. En los últimos días representantes del gobierno nacional se presentaron ante la comisión de Previsión Social de la Cámara de Diputados para defender el ajuste decretado por la Casa Rosada.
Pese a que el gobierno sostiene que la fórmula es beneficiosa para los jubilados debido a que los incrementos se ajustan por inflación, lo cierto es que con el empalme el Estado nacional descarga sobre los jubilados la inflación de enero a marzo. La cuenta es sencilla: si de acuerdo al Indec en enero la inflación fue del veinte por ciento, la de febrero un quince y la de marzo un trece según estimaciones “optimistas”, el total de la inflación del primer trimestre ascendería al cincuenta por ciento, lo que va a implicar una pérdida de más de un treinta por ciento para los jubilados. Esto es porque a cambio de la inflación de enero, febrero y marzo, en el mejor de los casos los jubilados van a recibir sólo un diez por ciento de recomposición.
Además de la crueldad que representa esto, sobre todo en el caso de los adultos mayores a los que se empuja a la miseria, esta reformulación de la fórmula de actualización jubilatoria, más lo que quiere hacer el gobierno con la cuarta categoría de Ganancias, no es ni más ni menos que echar más combustible a las llamas de la recesión. “El incremento de emergencia no debería ser un tema de discusión para ningún gobierno en el contexto económico actual, a excepción que el objetivo sea que el ajuste lo paguen los jubilados, tal como estamos viendo”, denunció Serra. Por ello, “los comunistas estamos al pie del cañón para organizar la lucha y lograr la unidad del movimiento”.